Guanajuato.— En los últimos cuatro años, al menos 10 buscadores y buscadoras de desaparecidos han sido asesinados en seis estados del país: Sonora, Zacatecas, Morelos, Sinaloa, Puebla y Guanajuato, este último estado con cinco casos.
En Nayarit, Juan Carlos Tercero Aley está desaparecido desde abril pasado.
Además, colectivos de Sinaloa, San Luis Potosí, Zacatecas y Tamaulipas han denunciado amenazas y acoso en su labor de búsqueda.
El caso Guanajuato
En Guanajuato, las buscadoras realizan su labor con miedo ante las muertes y desapariciones forzadas de sus compañeras y compañeros.
“Una disculpa, por seguridad no abordamos ese tema. Lo siento, pero no puedo opinar de eso”, respondieron las lideresas de colectivos de Irapuato y Celaya ante la posición que ocupa Guanajuato en crímenes en su campo.
Como una estrategia de seguridad, integrantes de los colectivos repiten durante sus labores de campo que lo único que pretenden es que sus familiares regresen a casa.
“Nosotras no buscamos culpables, sólo buscamos a las personas desaparecidas”, que es una idea que la Comisionada Nacional de Búsqueda, Karla Quintanilla, les pidió que reprodujeran desde las primeras acciones.
“Las buscadoras siguen la narrativa de la comisionada porque eso las protege, pero ya vimos que no es así”, subrayó Raymundo Sandoval, defensor de los derechos humanos y activista de la Plataforma por la Paz y la Justicia Guanajuato.
Considera que esa retórica propone que las buscadoras sólo se concentren en una dimensión que es encontrar y no en una dimensión de acceso a la justicia.
De 2020 a mayo de 2023 se tiene el registro oficial de cinco personas buscadoras asesinadas en Guanajuato, una cifra que podría ser mayor.
Raymundo Sandoval indicó que han recibido información de dos muertes más de buscadoras en Salamanca, de dos más en Salvatierra y de otro del que no reveló la zona.
Explicó que esto se debe a que “en Guanajuato hay búsquedas individualizadas que no están acompañadas de un plan de protección, lo que los deja indefensos.