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Cancún.- En sesión de Cabildo, el gobierno municipal de Solidaridad aprobó emitir un exhorto a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para que, en un ejercicio de transparencia y colaboración institucional, comparta los estudios que motivan la construcción del Tren Maya en el Tramo 5 , de Cancún a Tulum.
El exhorto incluye la solicitud de que estas dependencias federales convoquen a la instalación de mesas de trabajo con especialistas regionales para escuchar, analizar y tomar decisiones respecto al mega proyecto.
El tema se abordó durante la sesión 13 ordinaria de Cabildo, celebrada ayer, y fue aprobado por 14 votos a favor y tres votos en contra.
Ante cuestionamientos del regidor por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) , Luis Allán Ochoa Medina, quien consideró que la información ya existe solo porque el tema es abordado en “las mañaneras” del presidente Andrés Manuel López Obrador o porque se ubica en la página www.trenmaya.gob.mx –desactualizada– o que el exhorto confirmaría la oposición del gobierno municipal al proyecto, el síndico, Adrián Pérez Vera, atajó:
“Nadie, absolutamente nadie desea detener el Tren Maya (…) lo que se politiza se paraliza, aquí nadie está agarrando banderas, nadie está poniendo colores”, dijo, al explicar que tener acceso a los estudios que prueben que el proyecto no provocará daños irreversibles, permitirá que sea una obra exitosa, que no comprometa la calidad de los ecosistemas que atraen a millones de turistas y que son fuente de ingreso para la población.
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“Buscamos que no se descarrile y dañe lo menos posible nuestro medio ambiente (…) Este es un exhorto y quiero decirlo con las letras como son (sic): Amigable. Para que podamos, en equipo con la federación, con la información que ellos tengan sobre los estudios de impacto ambiental, poder tomar decisiones en conjunto”, expresó.
Durante su intervención aseguró que “a ningún solidarense le pareció” el derribo de 20 mil árboles sobre la carretera federal 307, de Cancún a Playa del Carmen, con motivo del trazo original, modificado al menos cuatro veces, ni el gasto millonario en vano.
“Yo creo que a ningún solidarense le pareció que hayan gastado más de 500 millones de pesos sobre la (carretera) federal, que hoy parece zona de guerra y no sirvió para nada”, sostuvo.
La alcaldesa Lili Campos respaldó lo anterior y mencionó que han tenido reuniones con personal del Fonatur, Sedatu, SCT y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), pero se necesita información, en un marco de coordinación.
Como antecedente, el secretario general del ayuntamiento, Humberto Novelo Zapata, recordó que el Fonatur y la Sedatu anunciaron a principios de este año la modificación del trazo original del Tramo 5, programado originalmente sobre la carretera federal 307 de Cancún a Tulum, para reubicarlo selva dentro.
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El 11 de febrero, durante la novena sesión de Cabildo, se aprobó expedir una anuencia sobre terrenos propiedad del municipio para llevar a cabo estudios diversos, como el deslinde topográfico, la colocación de referencias y mojoneras, levantamiento forestal, estudios arqueológicos, avalúos y cuantificación de bienes distintos a la tierra y estudios ambientales, sin conocer aun los resultados, aún cuando los trabajos ya iniciaron.
“En fechas 18 y 25 de febrero del presente año, la Sedatu publicó en primera y segunda publicación (sic) la declaratoria de utilidad pública relativa a 5 millones 355 mil 394.52 metros cuadrados de propiedad privada en los municipios de Benito Juárez (Cancún), Solidaridad y Tulum que serán destinados para la construcción de obras de infraestructura pública relativa al Tren Maya ”, indicó.
Los dictámenes de expropiación –dijo– explican la naturaleza del mega proyecto y sus pretendidos beneficios, así como la necesidad de expropiar propiedad privada para concretar las obras en ese tramo.
Los estudios que soportan la viabilidad ambiental, urbana, ecológica y económica “no se han hecho llegar ni son del conocimiento de los integrantes del ayuntamiento, por lo que esta autoridad colegiada no cuenta con información que acredite que los trabajos se han realizado, se están realizando o se realizarán”, manifestó.
Esa fue la razón de proponer el exhorto para que las autoridades federales antes citadas, “remitan los documentos, dictámenes, planos y todo aquel material de apoyo, así como también se abra el espacio al diálogo público mediante las mesas de trabajo en conjunto con autoridades de los tres órganos (sic) de gobierno, así como a la sociedad civil especializada y asociaciones civiles con interés en proteger los derechos ambientales”.
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Novelo Zapata mencionó que han sido advertidos por organizaciones civiles sobre el impacto que se produciría al manto freático, acuíferos y a la selva es considerado “muy grave y no hay forma de mitigarlo” y destacó que más de 40 biólogos y académicos de México, firmaron una petición dirigida al presidente Andrés Manuel López Obrador , para frenar los trabajos en el Tramo 5, ya que el trazo actual fragmentaría la selva, provocando la pérdida de conectividad ecológica.
“También se ha explicado que se pretende desarrollar el Tramo 5 en donde existe una inmensa reserva de agua dulce y pura, que mantiene el equilibrio ecológico e hidrológico que, a su vez, sustenta importantes ecosistemas como los humedales y el Arrecife Mesoamericano”, remarcó.
Al respecto, el regidor por el Movimiento Ciudadano (MC), Marciano “El Chano” Toledo –señalado como uno de los más beneficiados con el desarrollo del Tren Maya– aclaró que no se debe malinterpretar el exhorto.
“Nosotros no nos oponemos al Tren Maya. Nosotros únicamente pedimos es que tengamos los estudios necesarios”, expresó.
Ubicado en Playa del Carmen como un “cacique”, lo mismo que como un “luchador social”, Toledo Sánchez señaló que la construcción del Tren ha sido “manoseada por gente que ha venido de fuera para justificar acciones ecologistas”.
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Sin exhibir ninguna prueba, ni precisar a quiénes se refería en específico, acusó al movimiento ambientalista de recibir dinero de Calica, una empresa altamente cuestionada por los impactos ambientales generados a partir de la extracción de material pétreo en la Riviera Maya.
Sostuvo que el Tren “va a traer desarrollo”, pero matizó, al señalar que se rechazan “las ocurrencias” y los proyectos “de escritorio” elaborados por “gente que no sabe nada y solamente viene a atracar”.
Mencionó en esa lista –sin citar su nombre– al ex delegado del Fonatur en Cancún, Raúl Bermúdez, investigado por probables actos de corrupción al rentar para fiestas y reuniones las Villas Chakté, una propiedad pública localizada en esta ciudad.
E incluyó al exdirector general del Fondo, Rogelio Jiménez Pons, a quien calificó como un funcionario “prepotente” que fue “premiado” al reubicársele como subsecretario de la SCT, al ser relevado de su puesto original.
La concejal por la coalición PAN-PRD-Confianza por Quintana Roo, Matilde Carrillo Véjar, se pronunció a favor del exhorto debido a “la falta de certeza y de estudios específicos en la zona”, que impiden identificar los impactos específicos en los ecosistemas, según lo denunciado por científicos y sociedad civil.
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