A raíz del incidente, el Colegio Americano del Noreste guardó hermetismo y prefieren no hablar del tema. Incluso, hizo adecuaciones en la parte frontal de sus instalaciones para que no pueda observarse hacia el interior. En las semanas posteriores al ataque armado, pretendió aplicar exámenes antidoping a sus estudiantes, pero la medida fue rechazada por la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
Adoptó en cambios otras acciones como la instalación de un arco detector de metales, para evitar el ingreso de armas, y recomendó al mínimo el uso de mochilas, con lo que el personal docente priorizó el uso de internet para entregar a revisión los trabajos escolares.
El Colegio es una institución bilingüe con 30 años de antigüedad, que asume como misión el formar niños y jóvenes con un elevado nivel de formación cimentado en valores, alto sentido de responsabilidad, solidaridad y respeto, a fin de formar personas ejemplares y preparadas para triunfar en la vida.
Su compromiso es, de acuerdo con su página de internet, “preparar alumnos para enfrentar los retos del mundo actual, que exige personas honestas e íntegras, capaces de identificar y resolver problemas, proporcionando un nivel académico adecuado como instrumento personal de desarrollo”.
