Nos cuentan desde Zacatecas que quien anda fervoroso es Saúl Monreal Ávila, alcalde de Fresnillo (Morena) y hermano del senador Ricardo Monreal, pues tras vencer al Covid-19, fue a visitar a su familia y luego a dar gracias al Santo Niño de Atocha, en el Santuario de Plateros. Pero eso no es todo, nos señalan, ya que al hacer pública su fe, un par de familias invitaron al edil a cumplir sus mandas y rezar el rosario con ellos, a lo que don Saúl dijo que sí. En este sentido, nos señalan que, por sus actos devotos, no faltó quien le reprochó el estado laico o de plano aseguró que necesita un milagro en sus aspiraciones a la gubernatura y su deseo de rifar una camioneta blindada al estilo sorteo del avión presidencial. ¡Qué tal!
Nos cuentan que, en Baja California Sur, la presidenta del Instituto Estatal Electoral, Rebeca Barrera, tuvo un encontronazo con prácticamente todos los partidos políticos durante una sesión en la que se aprobó el reglamento de candidaturas para las elecciones 2020-2021, que incluyó modificaciones que no gustaron a todos los partidos, pues se les obligó a acatar medidas para incluir la representación de naciones indígenas y personas con discapacidad, incluso jóvenes. El problema, nos detallan, fue que, sobre todo PRI y PAN, mostraron una férrea oposición, acusando un cambio a bote pronto, confusiones y hasta negando la existencia de población indígena en la entidad. Inclusión y democracia... ¿hasta cuándo?
Hablando de temas electorales, nos narran que en Atlapexco, Hidalgo, ha caído muy mal que tres hermanos aparezcan en la boleta electoral, rumbo a las elecciones del domingo próximo. Se trata, nos detallan, de Joel, Antero y Julián Nochebuena Hernández, quienes se disputarán la alcaldía de ese lugar por los partidos Encuentro Social y Nueva Alianza, dos de ellos como propietarios y uno como suplente. Pero eso no es todo, nos dicen, pues en esta demarcación se habla de que la familia Nochebuena ha impuesto un cacicazgo, que se remonta a su abuelo, Juvencio Nochebuena Palacios, quien durante los años 20 y 50 fue diputado federal en siete ocasiones, senador y presidente municipal.
Quien finalmente cedió ante la verdad, nos comentan, fue el alcalde de Torreón, Coahuila, Jorge Zermeño (PAN), pues tras cesar a regañadientes al ahora exdirector de Tránsito y Vialidad municipal, Pedro Luis Bernal —acusado de permitir malos tratos a los ciudadanos—, anunció con bombo y platillo la llegada de Alejandro Gutiérrez Zamudio como nuevo director. Sin embargo, nos explican, lo que llamó la atención fue que, al tomar el puesto, don Jorge se comprometió a que ahora sí habrá un trato “cortés, digno y servicial” para los ciudadanos, como reconociendo, finalmente, los abusos de los elementos cuando estuvo al frente Pedro Luis Bernal.