Chilpancingo.- Por segundo día consecutivo, transportistas de los municipios de Petatlán y Zihuatanejo, en la Costa Grande de Guerrero, suspendieron el servicio después de ataques que sufrieron por presuntos integrantes de organizaciones criminales.
Este sábado los choferes que van a las colonias, comunidades y a la zona hotelera de Zihuatanejo cancelaron el servicio.
Los transportistas denunciaron que organizaciones criminales los extorsionan y advirtieron que reanudaran el servicio hasta que las autoridades garanticen su seguridad.
Lo mismo ocurrió en Petatlán; transportistas suspendieron el servicio por presuntas amenazas de organizaciones criminales.
El ayuntamiento de Zihuatanejo informó que este domingo se reunieron el jefe de la oficina del gobernador, Alejandro Bravo Abarca; el director General de la Comisión Técnica de Transporte y Vialidad, Miguel Ángel Piña Garibay y líderes transportistas, en donde se acordó que se estará restableciendo de manera paulatina el servicio público en Zihuatanejo.
La noche del viernes en Zihuatanejo fueron quemadas tres camionetas urvan del transporte público en tres hechos distintos. El primer hecho ocurrió en el bulevar Paseo de Zihuatanejo alrededor de las seis de la tarde, Según el reporte, hombres armados le quitaron la camioneta al chofer y obligaron a los pasajeros a bajar. Después le prendieron fuego.
La camioneta quedó en una subida y no pudo detenerse hasta que chocó con un auto compacto que también se prendió.
El segundo hecho ocurrió una hora después en la avenida Colegio Militar, ahí hombres quemaron otra urvan del transporte público; dos horas después, quemaron la tercera camioneta de pasajeros en el fraccionamiento Fragatas.
Estos ataques se dieron dos horas después de que en la carretera federal Zihuatanejo-Acapulco a la altura de la comunidad San Jeronimito, en el municipio de Petatlan, quemaron tres autobuses de pasajeros, un tráiler, un automóvil y una camioneta repartidora.
La quema se dio después de que policías estatales y federales desalojaron a un grupo de unas 300 personas, que desde el mediodía bloquearon la vía para exigir que la Policía Estatal abandone sus comunidades en la parte serrana de Petatlán por presuntos abusos.
El gobierno de Guerrero atribuyó el bloqueo a la organización criminal Guardia Guerrerense, que según la Fiscalía General del Estado (FGE) opera en los municipios de Zihuatanejo y Petalán.
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