Coicoyán de las Flores.—“Pedimos de favor que nos apoyen, aunque sea con láminas para construir una casita, nos venimos porque se venía todo el lodo atrás de nuestras casas”, dice un grupo de mujeres que abandonaron sus viviendas y están refugiadas en un edificio en obra negra que sería un hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que abandonaron desde el sexenio del expresidente Vicente Fox.
De acuerdo con los pobladores de la cabecera municipal de Coicoyán de las Flores, uno de los municipios con mayor rezago social en México y ubicado en la Mixteca de Oaxaca, las casas de más de 50 familias están en riesgo latente por deslaves, derrumbes y deslizamiento de la tierra a causa de las constantes lluvias en esta zona.
Prácticamente todos los cerros alrededor de la cabecera municipal tienen grietas, desde lejos se pueden observar barrancos que se han formado por las últimas lluvias, además de casas caídas y otras tantas con lodo amontonado en las cercanías. También hay viviendas que se han agrietado.
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Entre los barrios más afectados destacan San Sebastián, donde el temporal de lluvias y el huracán John cobró la vida de dos personas, un abuelo y su nieto de 12 años, el pasado 27 de septiembre.
“El cerro sigue desgajándose hacia un pequeño arroyo que se ha formado”, dicen los vecinos, quienes temen que continúe deslizándose más y pueda ocasionar más pérdidas.
Los otros barrios que presentan daños en las casas son el Barrio Tenorios, San José, Santa Cruz, Aguacates, Guadalupe, San Nicolás y Barrio Tejerías, entre otros, todos ubicados en la cabecera municipal de Coicoyán. Por ejemplo, en el barrio Aguacate se vino abajo una gran parte del cerro, por lo que tuvieron que abandonar sus casas.
Muchas de las familias afectadas se encuentran refugiadas en las instalaciones del que sería el hospital del IMSS, en la parte alta, desde el pasado 23 de septiembre, junto con sus chivos, borregos y pollos. Algunos cuartos los adaptaron para dormir y otros para cocinas, mientras esperan ver cómo van a regresar a sus viviendas, aunque muchas casas son inhabitables ya.
Otras personas se fueron con familiares y unas más siguen viviendo en sus casas porque no hay a dónde ir. Hasta el momento, las autoridades municipales de Coicoyan de las Flores no han emitido ningún comunicado sobre los daños, pese a decenas de familias desplazadas de por los eminentes daños.
“Todo el cerro se está viniendo abajo, pedimos apoyo a Protección Civil del gobierno de Oaxaca para que venga a valorar las casas, porque son muchas, todos los cerros se están desgajando”, afirma Rosa a EL UNIVERSAL, una de las vecinas de Coicoyán.
No es la primera vez que el municipio vive una emergencia de este tipo. En 2013, tras el paso la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid, decenas de casas quedaron inundadas y otro tanto quedó bajo el lodo por deslaves. Desde entonces, ni el gobierno municipal de Coicoyán ni los gobiernos estatal y federal han implementado una estrategia de reubicación para las familias.
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Por las lluvias, además del riesgo latente de las viviendas, también hay deslaves de la carretera principal que conduce de Juxtlahuaca a Coicoyán, en caminos de terracería que va a las comunidades, así como afectaciones en la infraestructura de las escuelas y en los cultivos de los campesinos.
Las autoridades del gobierno del estado informaron a EL UNIVERSAL que Coicoyán de las Flores está dentro de los 74 municipios que integran la solicitud a la Coordinación Nacional de Protección Civil de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de la declaratoria de desastre natural.
De cualquier forma, hasta el momento el gobierno federal sólo ha declarado en emergencia a Pinotepa Nacional, uno de más de 60 municipios que han solicitado ayuda extraordinaria por John.