El secretario de Desarrollo Social del estado, Raúl Carrillo Castaños, presentó su renuncia al cargo, derivado del escándalo por la compra de un lote de 2 mil colchones en mal estado, que fueron repartidos a damnificados por las lluvias.
En un breve comunicado, se informó que Carrillo Castaños dejaba el cargo a fin de que la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Secretaría de Transparencia y Rendición de Cuentas lleguen al fondo de las operaciones de compra de colchones viejos por 2 millones 970 mil pesos.
Mientras tanto, el coordinador administrativo de la Sedesol estatal, Carlos Baltazar Castro, presunto responsable de la adquisición del lote de piezas, detenido la tarde del jueves, ayer compareció ante un juez de Control.
Baltazar Castro obtuvo su libertad provisional, pero el próximo miércoles 24 de octubre continuará su audiencia. El ministerio público estableció que no existen facturas electrónicas que amparen los pagos que hizo.
Previo a la audiencia, en un acto público, el gobernador del estado, Quirino Ordaz Coppel (PRI), afirmó que todos los funcionarios que resulten implicados en este fraude, en perjuicio del erario público y de los ciudadanos afectados por la tormenta tropical 19-E, van a ser castigados, sin importar sus cargos en el gabinete.