Monterrey, NL.- Más de 200 taxistas de la CROC, pretendieron irrumpir violentamente en el Congreso del Estado , y destruyeron parcialmente a patadas la puerta de madera del recinto legislativo, cuando pretendían plantear a los diputados locales inicien “juicio político” contra el titular de la Agencia Estatal del Transporte del Gobierno del Estado, Noé Chávez Montemayor, y el Secretario de Desarrollo Sustentable , Manuel Vital.
Durante la trifulca, antes de que llegaran elementos de Fuerza Civil, los trabajadores del volante jalonearon y dieron empujones al personal de seguridad que custodia las instalaciones del Congreso, para tratar de ingresar al salón de plenos, y como la puerta principal estaba cerrada, la pretendieron forzar a patadas y golpes, sin lograr su propósito, pero destrozaron una de las tablas.
Los taxistas, encabezados por Osvaldo Serna Servín, secretario del Transporte de la CROC de Nuevo León, acudieron para exigir que se ponga un alto a la “cacería” de trabajadores del volante que llevan a cabo inspectores de la Agencia Estatal del Transporte con pretexto de la contaminación y por no traer permiso para operar, cuando, afirmaron, es responsabilidad del gobierno que desde hace años no ha otorgado nuevas concesiones, y hacen falta una cinco mil.
Los inconformes pidieron “piso parejo, al estimar que las autoridades son muy agresivas contra los taxistas piratas o irregulares, y en cambio hay tolerancia hacia los operadores de las plataformas digitales como Uber y otras, a quienes sí dejan trabajar “porque ya les llegaron al precio”.
Los manifestantes pidieron a las autoridades estatales una tregua, mientras se aprueba la Ley de Movilidad Sustentable , y se definen las reglas de operación para el servicio de taxis.
Después de una dos horas de protesta, frente a la entrada al recinto legislativo en el primer piso, y frente a la Oficialía de Partes en la planta baja, cuando además ocuparon con sus unidades estacionadas tres de los cuatro carriles de la calle Zaragoza, los taxistas acudieron al Palacio de Gobierno donde fueron atendidos por el Secretario de Gobierno, Manuel González Flores, que prometió cesar los operativos mientras se aprueba la legislación sobre transporte.
Cuando había pasado la trifulca en el Congreso, arribó el director de la Agencia Estatal del Transporte , Noé Chávez Montemayor, quien afirmó que sólo doce de los más de 200 taxistas que acudieron a agredir tienen permiso para operar, mientras “todos los demás representan la irregularidad”.
Ellos hablan de que les demos piso parejo, “claro que sí, les he invitado cantidad de veces a que se monten a una plataforma digital ¿por qué no lo hacen? Porque no quieren que sepamos quiénes son, porque no quieren que sepamos y revisemos sus seguros, es decir no quieren respetar la ley simplemente”, expuso Chávez Montemayor.
Advirtió, “si se les estorba la autoridad, pues no importa, yo no voy a claudicar, si quieren que venga aquí para que me golpeen, aquí me voy a poner, ustedes ya vieron de lo que son capaces, me pueden matar, me pueden hacer lo que quieran, pero no van a pasar por encima de mí”.
Además, dijo que el Congreso no lo puede someter a juicio político porque no es funcionario de elección popular, su puesto se lo encomendó el gobernador Jaime Rodríguez Calderón, y es quien puede decidir si se va o se queda.
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