El secretario General de Gobierno, Alejandro Leal, señaló que de manera oficial ya se hizo llegar el reclamo de parte del gobierno potosino al de Nuevo León por la muerte de dos personas originarias de Aquismón, quienes al parecer fueron víctimas de abuso policial por parte de elementos de la entidad vecina.
Refirió que se solicitó un informe a las autoridades neoleonesas por parte de la Fiscalía General del Estado, el gobierno potosino y la Secretaría de Seguridad Pública.
“Hablé con el Secretario General de Gobierno (de Nuevo León) para pedirles que nos informaran sobre los hechos, nosotros pensamos que fue un abuso y que repudiamos este tipo de actos, le hicimos un reclamo de manera oficial”.
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Dijo que hay disposición del Gobierno de Nuevo León, puesto que están abiertos al diálogo y señalaron que están revisando el asunto, además de que coinciden en que probablemente haya existido algún exceso por parte de la autoridad.
“Ya se abrió la carpeta de investigación por parte de la Fiscalía de aquel estado y ellos son los que esclarecerán los hechos”, explicó.
Cuestionado en el sentido de que el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, declaró que los policías simplemente estaban haciendo su trabajo, Leal Tovías respondió que la idea no es polemizar con nadie, pero sí se debe llevar a cabo la investigación de manera clara y correcta para que no haya lugar a dudas.
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Los hechos se registraron el sábado 26 de septiembre por la madrugada en una quinta que se localiza por el antiguo camino a Santiago, Nuevo León, en la colonia Los Cristales al sur de Monterrey.
Supuestamente cinco trabajadores de la construcción participaban en una convivencia después de concluir su jornada laboral, cuando arribaron al sitio elementos de Fuerza Civil a bordo de una patrulla, quienes pretendieron realizar “una revisión de rutina” a la que se opusieron los albañiles, y tras una discusión se registró una riña.
Los uniformados “al verse en peligro”, accionaron sus armas de cargo en contra de los trabajadores de la construcción, resultando muertos al instante el albañil Gregorio Santiago Margarito, de 40 años de edad, y un joven de 20 años de edad, del grupo que participaba en la convivencia.
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