Hermosillo.— Luego de que autoridades estatales y federales minimizaran la situación de riesgo de un grupo de 12 Madres Buscadoras de Sonora que fueron recibidas a balazos al llegar a un punto donde les habían reportado varios cuerpos sepultados, ellas responden: “nosotras sí estuvimos en riesgo”.
La tarde del domingo 10 de septiembre, las integrantes del colectivo atendieron un reporte anónimo sobre fosas clandestinas a la salida sur de Hermosillo, en las proximidades del Cerro de la Virgen.
“¿Cómo no íbamos a estar en riesgo si estuvimos en medio de la nada, si no había nadie más, más que nosotras?”, cuestiona una de las mujeres que estuvo en el lugar, quien busca a su hijo desaparecido desde 2021, y reserva su nombre por temor a represalias.
“Entonces, es profundamente mentira eso que dicen las autoridades”, reprochó la madre buscadora en referencia a las declaraciones de la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, quien en la conferencia de prensa de ayer en Palacio Nacional desmintió que hayan sido objeto de un ataque.
En declaraciones a EL UNIVERSAL, la madre dijo que recibió en varias ocasiones el reporte anónimo que le señalaba que en ese lugar estaba su hijo, así como otras personas desaparecidas.
Menciona que llegaron al lugar alrededor de las 14:30 horas y pudieron llegar al punto cerca de las 16:00 horas, porque “es un terreno muy extenso, entre dos cerros”.
“Ahí, justo cuando llegamos al punto, se escucharon los tres balazos”, relató.
¿Y ustedes qué hicieron?, se le preguntó a la madre buscadora.
“Nos hicimos bolita todas las madres, nos hicimos dos bolitas, porque andábamos dos grupitos, nos juntamos, ya fue cuando la seguridad se vino hasta donde estábamos nosotras. Llegaron los policías, y nosotras quedamos estáticas”, dice.
¿Cuando se registraron los balazos, los policías que estaban cerca de ustedes, ellos también los escucharon?
“No estaban ni cerca ni lejos, llegaron con nosotras y nos dijeron que guardáramos silencio para ver de dónde se escuchaban. Cuando volvieron a escuchar las detonaciones, que fue una ráfaga, dijeron ‘hay que retirarnos’.
“La Guardia (Nacional) dijo que nos teníamos que salir porque esa era una advertencia, que nos teníamos que salir de ahí porque estábamos corriendo peligro. Quién sabe qué hubiera pasado si nos quedamos ahí en el lugar.
“La opción que teníamos fue salirnos, porque sí, la verdad es que nos dio miedo. Entonces entramos en pánico, las compañeras y yo, y gracias a la Guardia Nacional y a la seguridad que llevábamos pudimos salir con bien, gracias a Dios”.
¿Consideran que fue un ataque contra ustedes?
“Yo pienso que sí, era directamente hacia nosotras, para que nos saliéramos porque ya habíamos dado con el punto.
“No sé si lo hicieron para amedrentarnos, para asustarnos, para que nos saliéramos. Ya estábamos en el punto.
“Yo tengo miedo por represalias que tomen en contra de mí y de mi familia. Yo me la vivo buscando a mi hijo donde quiera, aquí, allá, y la verdad sí temo de que me vaya a pasar algo a mí o a mi familia”, expuso la mujer.
Las integrantes del colectivo salieron del lugar con una fuerte experiencia; sin embargo, seguirán buscando a sus seres queridos.
“A pesar de esto, el amor no nos va a hacer medir, sabemos que ahí están nuestros hijos y con el amor de madre no medimos las consecuencias ni el peligro. Esperamos que ahora con eso que pasó nos den más seguridad para poder entrar a ese lugar”, pidió.
También exigió al gobierno del Estado y al gobierno federal que las regresan al lugar donde se escucharon las balas, porque necesitan seguir con la búsqueda.
“No vamos a dejar de buscar nomás porque nos asustaron, no vamos a dejar de buscar a nuestros desaparecidos. Queremos que nos den seguridad y que nos ayuden a buscar también, porque la verdad ahí está muy feo y lo que ocupamos es seguridad”, expone la madre.
Asegura que no se rendirán. “No vamos a dejar de buscar porque nos amedrenten. Soy una madre buscadora más, como muchas que andamos caminando con estos zapatos, que pensamos que nunca los íbamos a traer y ahora los traemos, expresó sollozando la mujer que escuchó los disparos, donde la autoridad asegura no hubo riesgo.
