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Guadalajara.— La violencia es el gran tema pendiente de la administración que deja Aristóteles Sandoval Díaz: 8 mil 144 homicidios dolosos durante su sexenio, una alerta de violencia de género emitida el pasado 22 de noviembre, más de 2 mil 600 desaparecidos, una crisis en el manejo de cuerpos de personas no identificadas y la expansión del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), considerado el más poderoso del país, son sólo algunos de los problemas que marcaron el gobierno del priísta.
Incluso, durante los últimos tres días de su mandato, siete policías fueron asesinados. Ante esta realidad, el gobernador ha reconocido que los esfuerzos realizados han sido insuficientes: “No hemos podido dar la vuelta al timón, sí, por supuesto que es algo que nos deja insatisfechos”.
A una semana de haber tomado el cargo, Sandoval Díaz se enfrentó de cara con la violencia: el 9 de marzo de 2013 su recién nombrado secretario de Turismo, Jesús Gallegos Álvarez, fue asesinado por el CJNG. De acuerdo con la investigación, los sicarios de este grupo delictivo cumplieron la orden de matarlo porque estaba trabajando para un grupo rival.
Dos años después, el 8 de abril de 2015, la escalada de violencia se hacía evidente: un comando del Cártel de Jalisco Nueva Generación emboscó en el municipio de Mascota a un convoy de la Fuerza Única Regional y asesinó a 15 policías que ni siquiera pudieron repeler la agresión.
Ese mismo año, el 1 de mayo, el CJNG derribó un helicóptero de la Fuerza Aérea Mexicana y mató a siete elementos de las Fuerzas Armadas en el municipio de Villa Purificación, además provocó 39 bloqueos con incendio de vehículo en distintos puntos de Colima, Jalisco y Nayarit; era el inicio de la llamada Operación Jalisco, que se supone tenía como principal objetivo la captura de su líder, Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho.
Desde entonces ese cártel se convirtió en el enemigo público número uno en la entidad y a nivel nacional se le consideraba como el grupo más poderoso de México.
Según una investigación hecha por 44 Lab, el laboratorio de periodismo de la Universidad de Guadalajara, durante el sexenio de Sandoval Díaz se registraron 100 enfrentamientos entre civiles y policías del estado, lo que provocó la muerte de 154 personas: 49 policías y 105 civiles.
Alerta de violencia al alza. Para enero de 2018, sin explicar los motivos, el mandatario estatal advertía que la situación de violencia en la entidad se complicaría, un par de meses después, tras las desaparición de tres estudiantes de cine en Tonalá, Aristóteles Sandoval se vio obligado a explicar las razones:
Una escisión en el CJNG dio origen al autodenominado Cártel Nueva Plaza, por lo que había una disputa por el territorio, principalmente en el área metropolitana de Guadalajara. Las autoridades atribuyeron la desaparición de los tres jóvenes a esa disputa y a que fueron confundidos.
Otros problemas. Para el Observatorio Jalisco Cómo Vamos, que realizó un diagnóstico del sexenio de Sandoval Díaz llamado ¿Qué has hecho, gobernador?, la inseguridad es el principal foco rojo; sin embargo, apunta otros pendientes de la actual administración, como la calidad del empleo, la implementación del nuevo sistema de justicia y poca mejora en la calidad de vida de las personas.
En contraparte, el análisis de este observatorio, que incluye académicos, empresarios, organizaciones civiles y periodistas, destaca como aciertos de la administración que concluye el crecimiento de la inversión extranjera y el aumento del número de empleos, avances tecnológicos en torno a la innovación y la construcción de la Línea 3 del Tren Ligero.
Según este diagnóstico, de los 132 indicadores para dar seguimiento al Plan Estatal de Desarrollo, sólo a 25 se les dio cabal cumplimiento, en siete hubo avances de más de 50%, en nueve el avance fue menor a este porcentaje y en 25 hubo regresión.