Tijuana.— El gobernador Jaime Bonilla Valdez afirmó que seguirán las inspecciones en el Aeropuerto Internacional General Abelardo L. Rodríguez de esta ciudad y que no se dejará amedrentar, luego de que fue detenido un empleado de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) que participó el miércoles en un operativo en la terminal.
Durante la transmisión que realiza diariamente por redes sociales, el mandatario dijo que los negocios dentro del complejo no tienen permisos sanitarios, e insistió en la cancelación de la concesión para Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP).
Precisó que el funcionario arrestado fue Vladimir Jasso, quien fue detenido por elementos de la Guardia Nacional y acusado de ataques a las vías de comunicación en su modalidad de terrorismo, luego de ingresar a un área restringida del inmueble sin autorización.
Tras el operativo en el aeropuerto, el funcionario fue trasladado a las oficinas de la Fiscalía General de la República (FGR) y liberado ayer.
Por segunda ocasión en menos de una semana, Bonilla Valdez pidió a la Federación cancelar la concesión al GAP por presuntamente incurrir en faltas, como evadir por años el pago del agua y predial, cuyo adeudo suma, aseveró, más de 700 millones de pesos.
De acuerdo con su versión, el operativo de inspección se originó una vez que se comprobó que el aeropuerto arrojaba aguas contaminadas a un canal pluvial, que desembocan en el canal del río Tijuana, lo cual origina un foco de infección grave, porque éste pasa por varias colonias.
“De esa manera es la prepotencia: ellos [en referencia a Grupo Aeroportuario del Pacífico] le dicen a la Guardia Nacional, a la Defensa Nacional, al fiscal, a los policías municipales, al estado, porque son los concesionarios, los jefes, son muy ricos... y siempre lo han hecho, ¿por qué no lo van a hacer ahora?”, declaró el jefe del Ejecutivo estatal.
A su vez, el titular de la Coepris, David Gutiérrez, dijo: “El aeropuerto es un foco de infección que atenta contra la salud pública de la comunidad”.