Chilpancingo.— El gobernador Héctor Astudillo Flores rindió su sexto informe de gobierno y aseguró que durante su administración los delitos como asesinatos, secuestros, los feminicidios y los robos, disminuyeron.

En un salón de Casa Guerrero con acceso restringido para prevenir contagios de Covid-19, ayer Astudillo Flores afirmó que Guerrero recuperó los 15 mil empleos formales que se perdieron durante la pandemia.

En su mensaje político, el mandatario adelantó que la próxima administración estatal, que encabezará la gobernadora electa Evelyn Salgado Pineda, tendrá problemas financieros como parte de los efectos económicos de la pandemia del coronavirus.

En su sexto informe, Astudillo Flores dijo que hace seis años, cuando recibió el gobierno, Guerrero estaba en el indignante primer lugar en homicidios dolosos. Afirmó que ahora, de acuerdo con datos del gobierno federal, está ubicado en el lugar 10 y refirió que Acapulco y Chilpancingo dejaron de ser de las ciudades más inseguras del país.

Con relación a los feminicidios, Astudillo Flores aseguró que Guerrero pasó del primer lugar al 21. Además, puntualizó que su gobierno atendió la alerta de género con violencia feminicida que declaró la Secretaría de Gobernación (Segob) en 2017.

También se refirió a los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala en 2014. Dijo que es una herida abierta que sólo cerrará cuando se recuperen a los jóvenes y se lleve ante las ley a todos los responsables.

El Ejecutivo estatal subrayó que la pandemia en Guerrero provocó la pérdida de 15 mil empleos formales y 40 mil informales pero, aseguró, “prácticamente están recuperados”.

Subrayó que el turismo, la principal actividad económica de Guerrero, ya se encuentra en plena recuperación.

En ese sentido, aseveró que en su gobierno se recuperó la llegada de cruceros y se abrieron ocho rutas. Asimismo, indicó, el turismo dejó una derrama económica de 258 mil millones de pesos.

Astudillo Flores expuso que la minería se convirtió en la segunda actividad económica porque genera unos 10 mil empleos directos y 50 mil indirectos.

“Entregaré una administración en marcha, por lo cual el próximo gobierno dispondrá de mayores capacidades de operación y acción política, no obstante, con responsabilidad debo referir que enfrentará una severa escasez de recursos”, comentó.

Explicó que la recaudación en Guerrero cayó 21% durante la pandemia, lo que equivale a 392 millones de pesos, mientras que la aportación federal disminuyó hasta en 8%.

“Para agravar la situación, este año no se ha contado con el fondo de estabilización de los ingresos de las entidades federativas que compensaba la disminución de ingresos con un apoyo especial para compensar la pérdida de participaciones federales”, lamentó el mandatario guerrerense.

Al sexto informe asistió como representante del Presidente de la República, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Manuel Villalobos Arámbula.

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