Chilpancingo.— Comerciantes del Centro y del Mercado Baltazar R. Leyva Mancilla abrieron negocios “no esenciales”, pese a que las medidas restrictivas para evitar la propagación de Coivd-19 se mantienen hasta el próximo 15 de junio, porque Guerrero está en el momento más crítico de la pandemia.
Desde hace días, locatarios y autoridades sanitarias junto con policías y militares mantenían una disputa por la reapertura de los establecimientos: unos los abrían, mientras que otros los cerraban.
El pasado lunes, después de que las corporaciones de seguridad impidieran que abrieran 300 negocios en el mercado y la misma cantidad en el Centro, los vendedores protestaron para exigir que los dejen trabajar; bloquearon calles por más de seis horas.
Los comerciantes se reunieron con el alcalde Antonio Gaspar Beltrán; sin embargo, no llegaron a un acuerdo, informó el locatario Eliseo Romero Ávila.
El edil, según contó el vendedor, les dijo que no podía permitirles la reapertura, porque el cierre se trata de un decreto del gobierno federal y no podía desacatarlo.
Ante el desacuerdo, desde hace dos días los afectados abrieron sus negocios que las autoridades sanitarias cerraron desde hace más de 20 días por ser “no esenciales”.
Por esta razón, en el mercado subieron sus cortinas florerías, tiendas de ropa, accesorios, bisutería, electrónicos y zapaterías.
En el Centro, en las principales avenidas —Altamirano, Insurgentes, Miguel Alemán, Ignacio Ramírez, Juárez y en andador peatonal Zapata— los comercios abrieron.
Desde que comenzó la pandemia ni en el centro ni en el mercado la movilidad se ha podido reducir incluso la central de abasto es considerada como uno de los focos rojos de contagios en Chilpancingo.