Cinco alpinistas estadounidenses quedaron atrapados en las partes altas del volcán Pico de Orizaba, la montaña más alta de México, por lo que fue necesaria la intervención de autoridades estatales de Veracruz y Puebla, federales e incluso de la Secretaría de Marina-Armada de México para su rescate.
De acuerdo con la Dirección General de Protección Civil Estatal de Puebla, desde la tarde-noche del sábado, cuando se tuvo conocimiento de que los alpinistas se encontraban varados en la zona conocida como El Sarcófago, a 5 mil 200 metros sobre el nivel del mar, se movilizaron diversas agrupaciones de ayuda.
Por medio del un sobrevuelo de un helicóptero de la Marina fueron avistados, pero debido a las malas condiciones del tiempo fue imposible realizar su rescate por ese medio, por lo que en la noche, por tierra fueron rescatados los dos primeros montañistas.
La mañana de ayer, la aeronave de la Marina logró recuperar a otros dos de los cinco montañistas, y el último fue bajado por la tarde junto con uno de los rescatistas que habría sufrido una caída.
De acuerdo con el reporte médico, Cody Brundidge, de 33 años de edad, presenta una doble fractura en el tobillo izquierdo; mientras que Alex Palomvo, de 25 años, presenta fractura en el tobillo derecho y en parrilla costal derecha. Ambos fueron trasladados al Hospital de Traumatología y Ortopedia Dr. Rafael Moreno Valle de Puebla.
Martt Yaquette, de 27 años, presenta una contusión en el ojo derecho y Veían Richards de 27 años tenía un esguince en el tobillo del pie derecho. El quinto montañista fue identificado como Michael Oconel, de 27 años.
La Dirección de Protección Civil Estatal informó que en otra zona del volcán, los equipos de rescate colaboran en el descenso de dos alpinistas guatemaltecos, independientes del primer grupo, que habrían intentado subir por una ruta diferente.
La semana pasada falleció el alpinista Jackson Wollfe en esta misma montaña y se logró rescatar a uno más extraviado. Ambos tenían más de 24 horas perdidos en la cara norte de la cordilllera.
El coordinador de Protección Civil en la región de Orizaba, Luis Palma Dector, explicó que la tardanza para bajar el cuerpo se debió a las condiciones del clima, aunado a que se trató de un rescate muy técnico que exigió resistencia física de los alpinistas, pues hubo un alto riesgo.
Ante los constantes accidentes, los gobiernos de Puebla y Veracruz, así como la Secretaría de la Defensa Nacional, anunciaron que activarán un protocolo de revisión en los accesos al Citlaltépetl, para evitar que grupos sin equipo ni experiencia suficiente asciendan a la montaña.