San Luis Potosí.— “Nos dejaron una herencia maldita de pobreza y desigualdad”, sentenció en su mensaje de inicio de administración, el gobernador constitucional de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo Cardona.
Luego de rendir la protesta de ley ante la soberanía del Congreso del Estado, que erigió como recinto temporal a la Plaza de los Fundadores, en el centro histórico de la capital del estado, el gobernador se dirigió a los potosinos. La sede del evento lució abarrotada.
Gallardo Cardona destacó ante los potosinos que el domingo inició una nueva era para San Luis Potosí, como resultado de una revolución política que ha podido alcanzarse “sin armas, ni caudillos, sino a través de una lucha hecha por el pueblo, en la cual se abre la oportunidad para que todos tengan las mismas oportunidades y acabar con la desigualdad social que existe en las cuatro regiones del estado”.
En su mensaje, el mandatario señaló que lo que recibe es “una herencia maldita”, que tiene que ver con al menos 20 mil millones de pesos en deuda bancaria y pasivos que deja la anterior administración, así como unos 700 millones de pesos en irregularidades, que han sido detectadas en la Secretaría de Salud, que el pueblo de San Luis Potosí “quiere que sean devueltos”, dijo.
Gallardo Cardona afirmó de igual manera, que los más de 3 mil policías que actualmente se encuentran en labores administrativas serán regresados a dar seguridad a los ciudadanos en las calles y otros mil que estaban asignados como escoltas a políticos, diputados o empresarios, dejarán de realizar esa encomienda porque se requiere brindar seguridad a la gente.
Asimismo, el gobernador lamentó que durante el proceso de entrega-recepción se haya destapado “la caja de Pandora” que ha revelado increíbles irregularidades por parte de varias dependencias estatales, como el caso de los medicamentos oncológicos apócrifos que adquirió el sector Salud.
“Eso es no tener madre”, acusó, por lo que sostuvo que estará atento a que se interpongan las denuncias correspondientes y que pague quien tenga que pagar “sin que se trate de ningún acto de venganza”.
Finalmente, hizo el llamado a los potosinos en general, a la reconciliación. Indicó que se acabó el San Luis Potosí en donde solamente una élite de privilegiados era a la que le iba bien; ahora todos los ciudadanos tendrán las mismas oportunidades no importando su estatus social, ni distinciones partidistas, religiosas ni de ningún tipo.
La toma de protesta de Gallardo Cardona se desarrolló en un ambiente festivo y sin manifestaciones de grupos inconformes, salvo los familiares de los jóvenes potosinos desaparecidos hace unas semanas en el estado de Jalisco, quienes pidieron al gobernador su apoyo para que la Fiscalía de Jalisco pueda dar con el paradero de estos jóvenes ciudadanos potosinos, quienes se encontraban en Tonalá.
Ricardo Gallardo, quien llegó al cargo por el Partido Verde Ecologista de México y el Partido del Trabajo, es el segundo gobernador en la historia de la entidad en asumir el cargo por una fuerza política distinta al Partido Revolucionario Institucional.