Culiacán, Sin
.- Pescadores ribereños que desafiaron el fuerte oleaje en busca de la captura de camarón, en las costas del municipio de Guasave tuvieron que ser auxiliados al quedar a la deriva, puesto que su embarcación se inundó y el motor dejó de funcionar.
Según el reporte, los tripulantes de una panga, salieron del campo pesquero de Alamitos y al intentar cruzar la barra de la Boca del Río, se inundaron y su motor se les apagó, por lo que cooperativistas pesqueros que se percataron del hecho les brindaron auxilio.
Desde el martes pasado, el capitán del Puerto de Topolobampo, Carlos Portillo Denis recomendó a los pescadores ribereños no salir a explotar crustáceo, puesto que las condiciones climáticas son adversas, por sorpresivas lluvias, vientos y fuertes marejadas.
Admitió que es difícil vigilar a los miembros de las cooperativas pesqueras que capturan, desde el pasado 11 de septiembre esta especie marina, puesto que estos salen de diversos campos pesqueros, sin ser vistos.
Un accidente similar en la misma zona, registrado el 16 de septiembre del 2017, dejó dos pescadores ribereños muertos y una más herido, al quedar a la deriva, en medio de un fuerte oleaje que se presentó.
Según el reporte, tres trabajadores del mar, de la cooperativa pesquera de las Abejas, del municipio de Guasave, no atendieron las recomendaciones de no salir a capturar crustáceo por lluvias, vientos fuertes y oleaje, por lo que al cruzar la Boca del Río, su motor se paró.
Con auxilio de cuerpos de auxilio, se logró rescatar los cuerpos de los pescadores ribereños Guillermo “N” y Rufino “N”, miembros de la cooperativa pesquera de las Abejas.
Dos días después de este incidente, la Estación Naval de Búsqueda, Rescate y Vigilancia Marítima ( ENSAR ) brindó auxilio médico a un tripulante del barco camaronero “Gerardito” que se amputó un dedo al realizar maniobras en la captura del camarón.
jno
