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Cancún.— El feminicidio de Jeydi, una mujer de 35 años cuyo cuerpo fue arrojado en un predio de la colonia Mártires Antorchistas, en Chetumal, movilizó nuevamente a las colectivas feministas para protestar, no sólo por el crimen, sino por el tratamiento revictimizante y violatorio de los derechos humanos que, sobre el hecho, hizo un periódico local.
Este lunes, con pintura roja sobre la ropa y el cuerpo, simulando sangre, integrantes de la Red Feminista Quintanarroense (RFQ), realizaron un performance para representar que en Chetumal, “la entrada sur hacia México”, están matando a las mujeres.
Las jóvenes se tendieron sobre banquetas, monumentos, letras turísticas y frente al Congreso, que mantienen tomado desde el 27 de noviembre, para ilustrar la macabra postal de las mujeres asesinadas en el estado: 54 de estos crímenes clasificados como homicidios y 13 como feminicidios en lo que va del año, contando el caso de Jeydi.
“El mensaje que manda el Estado a la sociedad es que podemos ser violentadas de todas las maneras posibles y que ninguno de los tres Poderes hace nada para proteger, garantizar y respetar nuestra vida y derechos”, denunciaron.
También condenaron el trato que un periódico local dio a la noticia sobre el feminicidio de Jeydi, al ser revictimizante.
Recordaron que, como parte del pliego petitorio de 54 puntos, entregado hace casi un mes al gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, se pidió un marco regulatorio para evitar la revictimización.
En tanto, se informó que el crimen de Jeydi será investigado como feminicidio.
