.- En el sitio donde el periodista Luis Enrique Ramirez Ramos fue lesionado en la pierna izquierda con disparos de arma de fuego y privado de su libertad, peritos en criminalística recolectaron rastros de sangre, un huarache que calzaba, un celular viejo dañado y dos casquillos percutidos de arma corta.
Vecinos de la calle Guadalupe Victoria Sur, en la colonia los Pinos, reportaron que frente a un expendio de cerveza, escucharon disparos y apreciaron que una persona era subida por la fuerza a un vehículo color blanco, sin mayores datos.
La Fiscalía General del Estado aún no determina si la sangre y el teléfono celular corresponde al fundador del portar de noticias “Fuentes Fidedignas “ y columnista del periódico el Debate, quien fue privado de la vida con golpes contundentes en la cabeza que le provocaron un traumatismo craneoencefálico.
Sara Bruna Quiñonez Estrada, titular del Órgano Autónomo de Justicia dijo que se formó un grupo especial dedicado a la investigación del homicidio del comunicador, cuyo cuerpo fue localizado la mañana del pasado miércoles en un camino de terracería que conduce a la colonia Antorchista, en la capital del estado.
Señaló que personal de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión coadyuvan en las investigaciones de este crimen, en las que aún no se tiene una hipótesis de los hechos, por lo que no se descarta ninguna línea a seguir, entre ellas, sus actividades profesionales.
Sin texto alguno, apareció en la cadena periodística El Debate, la columna de Luis Enrique Ramirez Ramos, denominada “ El Ancla ”, en reclamo por haber sido silenciado en forma violenta la mañana del pasado miércoles, cuyo cuerpo fue localizado, envuelto en plásticos en un camino de terracería que conduce a la colonia Antorchista.
En su edición del pasado viernes 6 de Mayo, circuló en el medio impreso, en el espacio que en forma cotidiana se leía su columna, solo la fotografía del finado periodista, con su firma y el nombre de su columna que desde hace varios años escribía, pero en esta ocasión en blanco.
Luis Enrique que se inició desde muy joven en esta profesión como auxiliar de cables en el extinto medio local, de nombre Diario de Sinaloa, la madrugada del cinco de mayo fue privado de su libertad muy cerca de su casa, en la colonia los Pinos, recibió dos disparos en la pierna izquierda y fue privado de la vida con golpes contundentes en la cabeza .
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