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Desde el Centro Penitenciario Femenil de Hermosillo , Sonora, Sylvia Consuelo Arvizu Lucero ganó el Concurso del Libro Sonorense , en el género de Crónica, con su obra “Las Celdas Rosas” .
La gobernadora Claudia Pavlovich
premió a los ganadores del Concurso de Literatura 2017 , donde entregó el reconocimiento a Sylvana, una niña de 11 años, hija de la comunicóloga “La Chiva”, presa desde el 2006 luego de que un año antes agredió a su ex pareja rociándole ácido en el rostro. Cumple una condena de 25 años de prisión.
La mujer ha ocupado su tiempo de encierro en leer y escribir, por lo que ha ganado varios concursos y es autora de otros libros como "Breve azul" (crónicas carcelarias) y "Mujeres que Matan".
El 2 de septiembre del 2005, la ex locutora de radio, alias “La Chiva”, de 27 años, en medio de una discusión con su ex pareja Obed Norberto Carpio Montaño, de 26, le vertió un vaso con ácido en el rostro.
Ella estaba embarazada de su nueva pareja y lo citó en la casa de sus padres para que le firmara los documentos de un carro que habían adquirido cuando estaban juntos.
Luego de la acción, huyó a Estados Unidos y en el 2006 fue aprehendida por la Interpol, posteriormente entregada a las autoridades mexicanas.
Obed era un amante del deporte, perdió la vista y su rostro quedó desfigurado por las graves quemaduras que sufrió de las cuales hasta la fecha se atiende en un hospital del condado de Maricopa, en Arizona, Estados Unidos, donde lleva tratamiento de rehabiitación.
Con una fuerza impresionante ha vencido la adversidad y como deportista ha representado a Sonora. Tiene licencia del Comité Internacional Paralímpico y ha participado en certámenes nacionales para Ciegos y Débiles Visuales. Practica algunos deportes entre ellos lanzamiento de jabalina y golbol.
En tanto, Sylvia Consuelo Arvizu Lucero, a 11 años de encierro, desahoga sus sentimientos y desborda su talento en hojas de papel que materializa en libros con los que ha atravesado los muros de los concursos interpenitenciarios para obtener distinciones al mérito literario en Sonora.
Desde el patio del reclusorio femenil, habló sobre su reciente obra: “El libro se titula Las Celdas Rosas y habla sobre crónicas penitenciarias, sobre lo que es la cotidianeidad, el día a día de estar en la cárcel, o de gente que tiene contacto o algún lazo con gente que está en la cárcel”. Esta obra la dedicó a su hija Sylvana de 11 años, quien le puso el título a su reciente obra.
“Me siento contenta, los premios siempre son como una caricia al ego, como un apapacho para el alma, al mismo tiempo son como un termómetro de que no son tan descabellas mis ideas; son un compromiso, una responsabilidad, cuando ganas un premio ya no puedes escribir con menor calidad, tienes que escribir de aquí para arriba, y lo que sigue”.
Reiteró que un premio es muy importante, “me siento muy honrada y me siento muy afortunada, muy bendecida, porque esto nada mas puede estar Dios mezclado en estas cosas que ocurren”. Esto es como un bálsamo, es una pequeña anestesia, como para Sylvia espérate, ahí viene tu libertad, expresó la autora del libro “Las Celdas Rosas”.
afcl