El exrector de la Universidad Autónoma de Nayarit , Juan López Salazar, quien se encuentra prófugo y acusado de cometer peculado, ejercicio indebido de funciones, enriquecimiento ilícito y desvío de recursos durante su administración en la casa de estudios (2010-2016), perdió seis inmuebles valuados en casi 7.5 millones de pesos y que ahora están a disposición el gobierno del estado.

Por solicitud de la Fiscalía estatal, que en 2018 aseguró las seis fincas del ex recto r para garantizar parte de la posible reparación del daño causado al erario, el 20 de septiembre de 2019 un juez declaró los inmuebles abandonados, por lo que quedaron a disposición del estado, sin embargo la esposa del rector interpuso un amparo.

La protección de la justicia federal se concedió a la esposa de López Salazar por considerarse que hubo omisiones en la notificación para que ella pudiera estar presente en la audiencia en la que se determinó el abandono de inmuebles, pues como se desconoce el paradero del ex rector, las notificaciones se hicieron a través de edictos.

El amparo concedido por el Juzgado Segundo de Distrito en Materia de Amparo provocó que la audiencia se realizará de nuevo el pasado viernes y el juez de Control volvió a declarar el abandono de los inmuebles, por lo que éstos quedaron a disposición de la Comisión de Administración de Bienes Asegurados, Decomisados o Abandonados del Estado de Nayarit, que ahora puede escriturarse en favor de la hacienda pública.

La Fiscalía de Nayarit informó que los bienes asegurados son los siguientes : inmueble de 404 metros cuadrados con un valor de 2 millones 828 mil pesos; inmueble de mil 390 metros cuadrados con valor de 834 mil pesos; inmueble de 90 metros cuadrados con valor de 585 mil pesos; inmueble de 111 metros cuadrados con valor de 1 millón 324 mil pesos; inmueble de 460 metros cuadrados con valor de un millón 380 mil pesos y otra propiedad de 111 metros cuadrados valorada en 499 mil 500 pesos.

A Juan López Salazar y Milton Romero González –actualmente presos y bajo proceso– s e les acusa de un desfalco de más de 375 millones de pesos en agravio de la Universidad Autónoma de Nayarit.

El caso se hizo público en diciembre de 2014, cuando después de no recibir el pago de aguinaldos, algunos trabajadores de la UAN denunciaron ante la Auditoría Superior de la Federación malos manejos en la universidad.

La dependencia federal derivó el caso al Congreso local y, un año después, en enero de 2016, se ordenó al Órgano de Fiscalización Superior iniciar una auditoría al ejercicio fiscal 2015 de la casa de estudios.

En 2016, cuando López Salazar ya había dejado el cargo, se envió a la universidad un pliego de observaciones para que solventara las irregularidades detectadas pero no hubo respuesta y a finales de ese año se interpusieron dos denuncias penales ante la Fiscalía.

Después de que se hicieran públicas las irregularidades financieras en la UAN, el ex rector Juan López Salazar hizo llegar una carta al actual rector, Ignacio Peña, en la que aseguró que tomó la decisión de buscar un préstamo con un particular para poder dar viabilidad financiera a la universidad, pues las presiones eran muchas y exigían respuesta inmediata, lo que hacía complicado conseguir un crédito bancario por lo lento de los trámites.

Actualmente la UAN no ha podido solucionar sus problemas financieros y desde la última quincena de octubre no hay recursos para pagar sueldos ni prestaciones.

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