Juchitán de Zaragoza.- Un grupo de 36 trabajadores del Hospital Covid-19 número 25 del Insabi , ubicado en Juchitán , protestaron en la entrada del mismo para pedirle al gobierno federal que aclare cuál será su situación laboral cuando este centro médico concluya sus funciones como centro especializado para atender a pacientes en terapia intensiva por causa del virus.
El hospital fue inaugurado el 20 de junio del 2020 por el gobernador del estado, Alejandro Murat Hinojosa, y por la senadora Susana Harp. Arrancó con 25 camas con ventiladores, donación del Grupo México durante los sismos del 2017.
Posteriormente, fue asignado para operar como Hospital de Especialidades Materno Infantil, pero con la pandemia se convirtió en un centro médico del Insabi, administrado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
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Los trabajadores, entre médicos y personal administrativo, refirieron que fueron contratados el 1 de abril de 2020 por el gobierno federal como parte de su campaña para hacer frente a la contingencia sanitaria; no obstante, ese contrato concluye el próximo 15 de junio y hasta el momento no han sido notificados de si les renovarán contrato o los reubicarán en otros espacios.
Informaron que mientras esperan los cambios, las autoridades comenzaron a mover a los pacientes internados a otros hospitales de la región, además de que los militares que resguardan la entrada también se retiraron a sus cuarteles.
Ante una falta de respuesta, decidieron realizar una manifestación durante la mañana de este martes, para pedirle al gobierno federal que aclare su situación laboral y que les cumpla con lo que les prometió cuando los contrataron; es decir, una reubicación después del servicio.
Asimismo, piden se les dé un contrato bajo el Sistema Nacional de Salud del Insabi.
afcl