Juchitán de Zaragoza.— Por segundo día consecutivo, comunidades escolares de la región bloquearon carreteras federales y ahora también cerraron tiendas de autoservicio para exigir a autoridades educativas, como el Instituto Oaxaqueño Constructor de la Infraestructura Física Educativa (IOCIFED) y el Instituto Nacional de Infraestructura Física Educativa (INIFED), que reactiven los trabajos de reconstrucción de escuelas.
Este martes las exigencias por el abandono de las obras a dos años del terremoto del 7 de septiembre también fueron dirigidas a la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu).
El primer bloqueo fue instalado en el punto denominado El Caracol, en Santo Domingo Tehuantepec, impidiendo el paso hacia la capital del estado y a las entidades vecinas de Chiapas y Veracruz, así como a la región de la Costa.
La manifestación estuvo nutrida principalmente por padres de familia y maestros de escuelas que pertenecen a la zona escolar 132 de Tehuantepec, que incluye preescolares y secundarias, y que depende de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Edicación (CNTE).
Luis Manuel Antonio Regalado, supervisor escolar, informó que en las escuelas de esta zona están suspendidas las obras de reconstrucción a pesar de que el titular de IOCIFED, Adolfo Maldonado, se había comprometido a que los trabajos comenzarían y se mantendrían sin pausa hasta su conclusión.
El lunes, el gobierno de Oaxaca reconoció en conferencia de prensa que el retraso de los pagos se debe a procesos burocráticos.
Los padres y docentes inconformes decidieron presionar ante el anuncio de reunión de trabajo programada para ayer, con el titular de IOCIFED y funcionarios de Sedatu e INIFED en Tehuantepec.
Un segundo bloqueo fue instalado en la carretera Panamericana a la altura de Niltepec, impidiendo el paso hacia Chiapas, el cual cumplió 36 horas de cierre por parte de padres de familia y maestros de la primaria Benito Juárez.
Iván Toledo, profesor de la institución, indicó que desde hace un año están suspendidos los trabajos de reconstrucción de 10 aulas y sanitarios, por lo que los niños toman clases en salones provisionales.
Mientras tanto, maestros y padres de familia de la Primaria Bilingüe Helidoro Charis Castro de Juchitán tomaron las instalaciones de las tiendas Soriana y Aurrera, también para exigir la reactivación de las obras de siete aulas en la escuela, pues los niños también reciben clases en tiendas de campaña.
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