Juchitán.— Cobros excesivos de más de 18 mil pesos por bimestre, daños en aparatos electrodomésticos, apagones constantes y hasta vacas electrocutadas figuran entre las razones por las que los pobladores de 67 comunidades de la zona norte del Istmo de Tehuantepec protestan contra la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
De acuerdo con el asesor de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), Carlos Beas Torres, la organización ha documentado casos como el de Agripino Lazo Romero, originario de Constitución Mexicana (municipio de San Juan Mazatlán). A él le llegó un recibo por 18 mil 216 pesos por el consumo eléctrico del periodo comprendido entre el 21 de agosto al 22 de octubre de 2019.
La historia se repite en Piedra Blanca, una pequeña localidad que pertenece al municipio de San Juan Guichicovi. Ahí vive Alberto López Santiago, quien tiene en su vivienda dos focos y un ventilador, por los cuales la CFE le facturó, en el periodo del 23 de octubre al 23 de diciembre de 2019, la cantidad de ocho mil 703 pesos.
“Es un cobro excesivo y por esa razón mucha gente se niega a pagar. Comes o pagas la luz, esa es la disyuntiva de los indígenas en el Istmo de Tehuantepec”, precisa.
Por ello, con la asesoría de diversas organizaciones sociales, como la Ucizoni, la Asamblea de Pueblos por la Defensa de la Tierra y el Territorio, y la Red de Vecinos contra las Altas Tarifas, unas cuatro mil personas que viven en el Istmo de Tehuantepec se han declarado, desde 2011, en huelga de pagos contra la CFE.
Consultada por EL UNIVERSAL, la vocera de la CFE en la capital oaxaqueña, Claudia Calderón Herrera, explicó que las tarifas eléctricas no las determina la comisión, y llamó a los usuarios a que hagan un uso responsable de la electricidad: “No habrá una opinión en especial, más que invitar a los usuarios a hacer un uso responsable de la electricidad”, declaró.
Además de las altas tarifas, los usuarios de la región reclaman afectaciones a electrodomésticos que datan, incluso, de 2013, sin que la CFE haya cubierto los daños.
Uno de tantos casos es el de Azael Velasco, quien vive en el poblado Plan de San Luis, perteneciente al municipio de Matías Romero. Una variación de voltaje quemó un televisor y un refrigerador.
De acuerdo con las denuncias recopiladas por la Ucizoni, hay constantes apagones en los municipios de San Juan Guichicovi, San Juan Mazatlán, Santa María Chimalapa y en la mayoría de las comunidades que pertenecen a Matías Romero.
En tanto, las vacas electrocutadas por caída de cables y postes en mal estado se reportan en los poblados de Donají y Palomares (Matías Romero), La Esmeralda (Santa María Chimalapa) y Brena Torres (San Juan Guichicovi).
Los daños a los electrodomésticos también se reportan en colonias de Matías Romero, en Santa María Petapa, Mogoñé Estación (Guichicovi), San Antonio Tutla (San Juan Mazatlán) y Platanillo (Santo Domingo Petapa).
Otro de los casos de personas afectadas por los apagones y cambios de voltaje es el de Tomasa Hernández, quien registró descomposturas en un minicomponente, un teléfono y las luces del árbol de Navidad en diciembre de 2013; ella vive en el poblado La Chigola, del barrio de La Soledad.
Desde el 2 de mayo de 2018, cuando la agencia comercial que la CFE tiene en Matías Romero recibió la lista afectados por variaciones de voltaje, quema de electrodomésticos y cobros excesivos, no ha habido respuesta de funcionarios de dependencia para los afectados.
El pasado jueves, representantes de 17 comunidades, aglutinadas en la Resistencia Civil de Ucizoni, acordaron movilizaciones el 20, 21 y 22 de febrero contra la CFE, pese a que fueron atendidos por la Secretaría de Gobernación (Segob) y la comisión.