Monterrey, NL
.- Diputados del congreso de Nuevo León exigieron a la administración municipal de Apodaca, responsabilizarse por la muerte de Emilio Saúl Hernández Martínez , de 14 años de edad, estudiante de secundaria que sufrió una descarga eléctrica al tocar un poste del alumbrado público, cuando trataba de salvar a un compañero de la escuela, mientras se registraba un aguacero.
A raíz del accidente, registrado el lunes por la tarde en la calle José Clemente Orozco, en la colonia Quinta Colonial, además resultaron lesionados dos menores, pero se encuentran estables, entre ellos Pablo, de 12 años, estudiante de primero de secundaria.
Al salir de la escuela “ Jorge Carpizo ”, los adolescentes regresaban a sus casas cuando se registró un fuerte aguacero que inundó las calles del sector.
Según la grabación de una cámara de video colocada en un establecimiento comercial cercano, al tocar un poste del alumbrado, Pablo de doce años, recibió una descarga eléctrica y cayó al agua.
Emilio Saúl y su amigo Brandon, ambos de 14 años, lo quisieron ayudar para que no se ahogara, pero al tocarlo también sufrieron la sobrecarga de energía.
Al final los tres menores fueron sacados del agua por la joven Stefany Garza y otros vecinos, pero Emilio Saúl no pudo sobrevivir.
Según la Fiscalía General de Justicia del Estado, el menor Emilio Saúl, murió ahogado, después de caer seminconsciente por la descarga eléctrica, que se produjo porque los cables descubiertos del alumbrado público hicieron contacto con las corrientes de agua.
La diputada panista Marlene Benvenutti expresó que pudo evitarse la muerte del estudiante y las lesiones a otros dos menores, si las autoridades municipales hubieran atendido las quejas de los vecinos del sector, que desde 2010 habían advertido del peligro que representaba el cableado eléctrico expuesto, debido a los daños que ocasionó el huracán Alex a su paso por Nuevo León.
La legisladora dijo que era conocido que uno de los postes del alumbrado se “electrizaba”, cada vez que había humedad o corrientes de agua, por lo que la muerte del estudiante Emilio Saúl, es resultado de la negligencia de la autoridad municipal.
Asimismo, propuso un punto de acuerdo que fue aprobado por unanimidad y estuvo dirigido al presidente municipal de Apodaca, Oscar Alberto Cantú García , para que se investigue la queja de los vecinos de la colonia y se sancione cualquier irregularidad por no atender las fallas que ocasionaron la tragedia.
La activista y ex diputada local y federal, Liliana Flores Benavides , exigió que el ayuntamiento de Apodaca y la Comisión Federal de Electricidad, indemnicen a la familia del niño fallecido, al morir electrocutado (ahogado después de la descarga, según la fiscalía), cuando buscaba salvar a otros menores.
Flores Benavides explicó que Emilio Saúl cuidaba a sus hermanas menores para que su madre pudiera trabajar y mantener a la familia porque el padre los abandonó.
JNO
