Un aproximado de dos mil pobladores de la comunidad Lajerío, en el municipio de Frontera Comalapa, se desplazaron a causa de la violencia por los enfrentamientos entre integrantes de los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, informaron habitantes de la zona.
Este sábado hubo una tregua en las hostilidades, retiraron los bloqueos y permitieron que durante dos horas la población adquiriera víveres.
Lugareños dijeron que a las 11 de la mañana "avisaron que podíamos ir a hacer las compras, la despensa. Mucha gente salió, y a la una de la tarde dijeron que se retiraban los bloqueos”.
Dieron a conocer también que un joven que hace tres días cumplió 15 años murió hace dos días en ese poblado por el impacto de una bala perdida, cuando estaba con su familia en su vivienda.
“Dentro de todo lo malo se logró que los hombres armados permitieran que fuera sepultado en el panteón, porque ni siquiera eso permitían”, agregaron.
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De acuerdo con los testimonios de Lajerío, oficialmente llamado Nueva Independencia, "prácticamente salió toda la gente; apenas este sábado salió una señora y dijo que ya el pueblo está en silencio, que no hay ningún alma".
"Algunos hombres fueron a sacar los animales del corral, a darles agua para que no se mueran de sed. Hay mucha tristeza en la gente que tenga que dejar sus viviendas y sus animales”, lamentaron.
La violencia desatada por los grupos armados ha obligado asimismo al desplazamiento de algunas familias de la vecina comunidad La Candelaria, los choques armados ocurrieron entre La Candelaria y Lajerío, y están dispersos incluso en poblados del municipio vecino de Chicomuselo.
“La gente huyó al monte, a las cuevas, las montañas y también fueron a refugiarse con familiares en otros lugares” para ponerse a salvo de la violencia, relataron.
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Señalaron también que se tienen reportes de saqueos en las viviendas de la gente desplazada y de "que hubo muchos muertos”.
Este sábado el poblado tuvo una aparente calma porque abrieron las entradas y salidas, aunque "el peligro sigue latente. La noche es muy tensa e incierta", expresaron.
Comentaron que los hombres armados desbloquearon pero permanecieron en esos puntos cerrados.
Enmedio de la tensa calma, la parroquia local difundió que canceló las misas dominicales, previstas en su templo para las 06:00, 12:00 y 17:00 horas.
La autoridad católica dijo que se suspendieron los servicios religiosos porque no hay condiciones para oficiar ni de seguridad para la feligresía, y urge el ingreso del Ejército Federal y de la Guardia Nacional para restituir el orden y la tranquilidad comunitaria.
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