Zacatecas.- La Legislatura de Zacatecas aprobó un punto de acuerdo que exhorta la Secretaría de Comunicaciones y Transportes del gobierno federal, así como a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público , a “crear un esquema fiscal amigable” que facilite a los migrantes mexicanos radicados en el extranjero a que inviertan sus remesas en el proyecto denominado Tren Maya y que "se les permita gozar de los incentivos, rentas o utilidades para los inversionistas".

Esta iniciativa presentada por el diputado Javier Calzada Vázquez fue analizada y dictaminada por la Comisión Legislativa de Comunicaciones y Transportes, enfocada al proyecto denominado Tren Maya planteado por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador que pretende atravesar los estados de Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo y Chiapas en un recorrido de mil 525 kilómetros.

En la exposición de motivos, la iniciativa menciona que luego que se ha informado que dicho sistema ferroviario terminaría de construirse en un plazo de cuatro años, con una inversión de entre los 6 mil y 8 mil millones de dólares; es decir, 120 mil y 160 mil millones de pesos, el mismo Presidente de la república ha reconocido que la inversión pública que se haga en el proyecto sería insuficiente, es aquí donde se hace el planteamiento de la necesidad de la mezcla de recursos, incluyendo los provenientes de inversionistas privados.

Ante esta situación, el diputado Javier Calzada considera que es inevitable que un proyecto de esta naturaleza atraiga a grandes inversionistas nacionales e internacionales y que algunas otras personas con capacidad económica, la cual se asienta que debe estar plenamente justificada.

Por tal razón, el exhorto que este jueves fue aprobado por la Legislatura local destaca y propone al gobierno federal que se considere la experiencia zacatecana de inversión privada en obras de beneficio social durante varias décadas a través del programa migrante 3X1, mediante el cual los zacatecanos radicados en los Estados Unidos, de manera solidaria invierten recursos propios, los que, en una mezcla exitosa con recursos estatales y federales.

Por ende, se plantea que bajo esta experiencia es posible que los recursos de los migrantes mexicanos radicados en los Estados Unidos pudieran invertir en proyectos como el Tren Maya , con el adecuado esquema fiscal y las reglas de operación que faciliten a los connacionales en el extranjero aportar recursos, de manera tal que coadyuven en una obra que pretende grandes beneficios sociales y, desde luego, sean beneficiarios directos de los incentivos para los inversionistas y, como consecuencia, de los rendimientos que aporte su inversión.

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