Más Información
Sheinbaum explica reducción a presupuesto para protección a migrantes mexicanos; “Sí hay un ajuste, tiene que ver con los altos salarios"
Denuncian agresión de presuntos militares contra trabajadores en Tamaulipas; una de las víctimas falleció, tenía huellas de tortura
Juchitán-. Las autoridades de la Secretaría de Gobierno de Oaxaca (Sego) confirmaron que se mantienen los operativos de vigilancia sobre la carretera Transístmica, donde en la tarde de ayer sujetos armados dispararon contra un autobús de pasajeros de la empresa Sur, que dejó a una persona herida de bala en la pierna izquierda.
Por la noche, luego que un autobús de la misma línea se incendió por un corto circuito, según reportó el conductor, sobre la carretera Transístmica, en el límite de Oaxaca y Veracruz, las diversas corporaciones policiacas establecieron retenes o filtros de vigilancia en los poblados de Sarabia y Palomares, que pertenecen al municipio de Matías Romero.
La persona lesionada, quien se identificó como Everardo, aún sigue hospitalizada para su recuperación, a pesar de que no hubo necesidad de ser intervenido quirúrgicamente debido a que el proyectil no fracturó hueso alguno, explicó el director del hospital civil de Juchitán, Ovidio Pineda Castillo.
De acuerdo con el reporte de las autoridades, las labores de vigilancia en las que participan elementos de la Defensa Nacional, de la Armada, de la Guardia Nacional, de la Policía Estatal y de Vialidad, se mantienen con la finalidad de garantizar la protección de la ciudadanía.
Con las tareas de vigilancia sobre la Transístmica por parte de las diferentes corporaciones policiales, los autobuses de la línea Sur, que cubre la ruta desde Salina Cruz a Coatzacoalcos, este domingo los autobuses de la referida empresa circularon con normalidad.
En Juchitán, decenas de mujeres comerciantes empacan sus mercancías y abordan el transporte a Veracruz.
Doña Clara, una juchiteca que sigue la tradición de sus antepasados, comenta que sabe de los mensajes amenazantes que han circulado en la zona norte del Istmo, que enlaza a la planicie istmeña con las poblaciones del sur del estado de Veracruz, donde desde principios del siglo pasado habitan familias zapotecas.
“Tenemos algo de miedo, pero el negocio debe seguir”, dijeron.
Lee también Reportan desaparición de César David Choreño Castañeda, directivo de Valeo México en SLP
Doña Clara, una juchiteca que entrega rollos de totopos en bolsas de papel de los sacos que originalmente eran para almacenar harina de maíz, al mercado de Minatitlán, Coatzacoalcos, Nanchital, Pajaritos, Las Choapas y Nuevo Morelos, en la zona petrolera del sur de Veracruz, dice que seguirá viajando, al igual que doña Carmen, que surte frutas curtidas como ciruelos y mangos.
La relación familiar y comercial entre las familias zapotecas que viven la planicie del Istmo oaxaqueño con los habitantes de las poblaciones petroleras del sur de Veracruz data de principios del siglo pasado, cuando miles de istmeños acudieron a laborar en la construcción de la refinería de Minatitlán.
“Seguiremos viajando, con todo y riesgo, porque el negocio da de comer”, dicen.
ss