Los sacerdotes Javier Campos Morales “El Gallo” y Joaquín César Mora Salazar “El Morita” , fueron asesinados durante un ataque armado en una iglesia de Urique, Chihuahua.
De acuerdo con las autoridades de Chihuahua, el ataque ocurrió alrededor de las 18:00 horas del lunes, en el poblado de Cerocahui, municipio de Urique, en la sierra de Chihuahua.
Aparentemente el ataque ocurrió después de que un hombre intentó resguardarse en una iglesia de un ataque entre grupos armados, sin embargo el victimario lo agredió en el interior, al igual que a dos sacerdotes que se encontraban también en el templo.
De acuerdo con información de la Compañía de Jesus, estos son los perfiles de Javier Campos Morales “El Gallo” y Joaquín César Mora Salazar “El Morita”, asesinados en Chihuahua.
Nació el 13 de febrero de 1943 en la Ciudad de México.
Durante su niñez y adolescencia vivió en Monterrey, NL. Posteriormente ingresó al Instituto de Ciencias en Guadalajara, Jalisco.
Ingresó a la Compañía de Jesús el 14 de agosto de 1959, a la edad de 16 años, para ser ordenado sacerdote el 8 de junio de 1972 en la Ciudad de México.
Un año después empezaría su misión como superior local, vicario pastoral y episcopal en la Sierra Tarahumara, en la comunidad de Norogachi.
Llegó a ser Párroco en Guachochi (1974-1983), Chinatú (1987 – 1999), en Cerocahui (1996 – 2016), para regresar en 2019-2022 donde fungiría como Superior de la Misión Jesuita, Párroco, Vicario de Pastoral Indígena de la Diócesis de Tarahumara, Asesor Regional de CEB’S (Comunidades Eclesiales de Base).
Nació el 28 de agosto de 1941 en Monterrey, NL.
Ingresó a la Compañía de Jesús el 30 de julio de 1958, a los 16 años.
Fue ordenado sacerdote el 1º de mayo de 1971 en Monterrey, NL, su ciudad natal. Misionó en la Sierra Tarahumara durante 6 meses 1976 en Sisoguchi, donde fue Vicario Cooperador.
En la misma Tarahumara realizó su Tercera Probación (1976 – 1977) y regresaría en 1998-1999. Desde el 2000 fungió como Vicario Parroquial en Chínipas, hasta 2006, posteriormente como Vicario Cooperador en Cerocahui, Chih., desde 2007 hasta la fecha.
El Padre Hernán Quezada, integrante de la comunidad jesuita en México, en entrevista para Aristegui Noticias, lamentó el hecho y mencionó que esperan recuperar los cuerpos de los sacerdotes asesinados.
“Nos estamos moviendo en todos los niveles porque hay un tema, primero, la seguridad de toda la comunidad, es una estación muy compleja y el siguiente es recuperar los cuerpos de nuestros hermanos".
"Eran parte del pueblo, queridisimos, respetados, amados por muchas personas en la Sierra Tarahumara".
En un comunidado, la Compañía de Jesús condenó y exigió justicia por el asesinato de los sacerdotes.
"Los jesuitas de México, con profundo dolor, denunciamos el homicidio de nuestros hermanos... Condenamos estos hechos violentos, exigimos justicia y la recuperación de los cuerpos de nuestros hermanos que fueron sustraídos del templo por personas armadas.
"También demandamos que de forma inmediata se adopten todas las medidas de protección para salvaguardar la vida de nuestros hermanos jesuitas, religiosas, laicos y de toda la comunidad de Cerocahui".
Lee también
: Extorsión, delito imparable; alcanza niveles récord
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, opciones para el fin de semana, Qatar 2022 y muchas opciones más.
rdmd