Ciudad Hidalgo.— Más de 40 mil peregrinos indígenas mam y quiché que llegaron a venerar al Señor de las Tres Caídas al templo de Tecún Umán, Guatemala, cruzaron a México para realizar compras en la feria del Primer Viernes de Cuaresma, de esta localidad.
Durante la semana, los peregrinos provenientes de comunidades del altiplano de Guatemala como Totonicapán, Momostenango, Chichicastenango, Quiché, Cobán, Huehuetenango, entre otras, se postraron ante la imagen del Señor de las Tres Caídas para pedir por la sanación de sus enfermos, el bienestar de sus hogares, cosechas y negocios, pero también por sus hijos ausentes.
Uno de ellos es don Santos Florencio, quien junto con su esposa Virginia viajaron desde Comitancillo, una ciudad de la etnia mam, para agradecer que lo curó de unas dolencias en su cuerpo, y pedir por sus hijos y nietos que se encuentran trabajando en Estados Unidos, y por una buena cosecha para este año.
Doña Reyna, de 80 años, llegó hasta la imagen para venerarla, agradecer por los milagros concedidos, pedir por su salud y reprender por la pandemia de Covid-19, la cual ha librado.
La imagen que representa las tres veces que Jesucristo cayó con la cruz en su trayecto al Calvario es un patrimonio cultural tangible de la nación, y la romería intangible, que ha movido guiados por la fe y tradición desde hace 120 años a miles de indígenas.
La celebración de la imagen del Señor de las Tres Caídas, cuya iglesia se ubica en el poblado de Tecún Umán, Guatemala, que colinda con México, coincide con la feria del Primer Viernes de Cuaresma que se celebra en esta localidad fronteriza.
Tras el acto religioso, los peregrinos cruzan a México caminando o en balsas improvisadas para comprar, aprovechando el tipo de cambio que les favorece.
La fe, devoción y tradición de los romeristas guatemaltecos deja una cuantiosa derrama económica a comerciantes de esta localidad, así como a los que llegan de Monterrey, Nuevo León, Coahuila, Puebla y Ciudad de México con diversos productos.
En medio del afluente, doña Rosy, de foto estudio Castro, como hace 20 años, instaló diversos escenarios para la foto del recuerdo. Uno de ellos es la réplica de un caballo y al fondo las banderas de México, Guatemala y EU.
“¡Pásele, pásele, a 30 quetzales o 50 pesos la foto del recuerdo!”, ofrecen a los paseantes. Doña Rosy se queja de que el negocio de las fotos impresas instantáneas ha bajado en los últimos cinco años, debido a que todas las personas prefieren sacarse imágenes con sus celulares.
120 AÑOS lleva realizán-dose la pere-grinación para venerar al Señor de las Tres Caídas en Tecún Umán.
Santos Florencio
Peregrino
“[Venimos a] pedir por nuestros hijos y nietos que se encuentran trabajando en Estados Unidos, y por una buena cosecha para este año”
Rosy
Dueña de estudio fotográfico
“El negocio de las fotos impresas ha bajado en los últimos cinco años, debido a que todas las personas prefieren sacarse imágenes con sus celulares”