Quien salió más cambiante que el clima en el inicio de Legislatura en Nuevo León, nos cuentan, fue la diputada local María Guadalupe Guidi Kawas, quien llegó al Congreso como plurinominal de Morena, pero les volteó bandera. Nos detallan que doña Guadalupe acudió la semana pasado a una reunión de la bancada de MC y con el gobernador electo, Samuel García Sepúlveda, y el lunes —antes del arranque del Congreso— juró y perjuró que seguía siendo guinda. Sin embargo, nos dicen, a media semana se pintó de naranja, con lo que la bancada de MC suma siete legisladores y se prevé que haga mancuerna con el PAN. Si que traía escondida la camiseta.

Le aplican la de “Ai pa’ la otra”

Hablando de Congresos, la que anda enchilada y lo que le sigue en Yucatán, nos comentan, es la diputada local Jazmín Villanueva Moo (Morena), porque no fue la elegida para coordinadora de bancada, aun con su reelección. Nos detallan que el nombramiento recayó en la excoordinadora de la Secretaría del Bienestar, Alejandra Novelo Segura, quien, dicen las malas lenguas, obtuvo su diputación y la coordinación por las buenas relaciones que tiene en la dirigencia nacional, pero a doña Jazmín le cayó como patada al hígado y no le queda de otra que más que “agua y ajo”.

2x1: dos chambas, por un sueldo

Desde Chiapas, nos alertan que el delegado federal de programas sociales José Antonio Aguilar Castillejos (Morena) se puede meter en un buen lio, pues van varias denuncias en su contra por explotación laboral, debido a que presuntamente pone a dobletear a la gente a su cargo. Nos cuentan que don Antonio está preparando una organización para proyectar su imagen y cumplir su sueño de ser gobernador, pero somete a su personal a extenuantes jornadas laborales para que le hagan la chamba con un sólo sueldo, e incluso, nos dicen, también aprovecha los padrones de Bienestar para ir armando su red. Qué vivillo.

Le meten gol al Cuau

La que metió un gol a la administración de Morelos, nos cuentan, fue la titular de la Contraloría, América Jiménez Molina, pues justo el día en que el secretario de Salud estatal, Marco Antonio Cantú Cuevas, anunció el retroceso al naranja en el semáforo epidemiológico, doña América hacía el mole para la boda de uno de sus hijos. Nos relatan que doña América hizo oidos sordos al llamado de don Marco a la prudencia y a evitar fiestas, y junto unos 60 invitados departieron en un casco antiguo de una exhacienda, por rumbos del municipio de Jiutepec, donde (obvio) no hubo sana distancia ni cubrebocas, pero lo que molestó a varios fue que no hubo ni un llamado de atención a la funcionaria. ¿No que la 4T había acabado con los privilegios?