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Morelia.— Desde el pasado 26 de mayo, la violencia se ha recrudecido en el municipio de Parácuaro, donde se ha registrado una escalada de enfrentamientos que han atemorizado a los pobladores, al grado que algunos optaron por dejar de llevar a sus hijos a la escuela y, más recientemente, se suspendieron las clases en planteles de nivel básico.

Los habitantes de este municipio —ubicado en la Región de Tierra Caliente a 190 kilómetros de la capital michoacana—, también han cerrado negocios y solicitado, con el respaldo de la Iglesia católica, mayor seguridad.

Sin embargo, esta serie de enfrentamientos, en gran parte de la región de Tierra Caliente es, de acuerdo con las áreas de inteligencia estatales, resultado de una fractura al interior de Los  Viagras.

La operatividad de este grupo —liderado por los hermanos Sierra Santana—, ha dejado en la zona, considerada su principal bastión, cerca de 140 asesinatos en lo que va de este año, revelan datos de la Procuraduría General de Justicia de Michoacán.

Estas cifras corresponden al acumulado en los municipios de Aguililla, Buenavista, Apatzingán, La Huacana, Múgica, Parácuaro e incluso Uruapan, aunque este último no pertenece a Tierra Caliente, pero que es una zona de movilidad de este grupo criminal.

Las fracturas. Para las áreas de inteligencia, la división del grupo criminal se evidenció a partir del 3 de abril pasado cuando fue asesinado Federico Villegas García, El Lico, quien fue ex líder de las otrora autodefensas en la tenencia de Antúnez, municipio de Parácuaro, y era identificado por las instancias de seguridad como uno de los principales brazos armados de Los  Viagras, en su lucha contra el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Los informes indican que junto con El Lico, César Ventura Delgado Calderón, El Turicuas, uno de sus más cercanos colaboradores también fue asesinado por sujetos armados. A decir de habitantes del lugar, sicarios al servicio de Los  Viagras fueron quienes perpetraron el doble homicidio.

Desde ahí, se han vuelto interminables los enfrentamientos a tiros por diferentes comunidades de esta zona de la Tierra Caliente.

De acuerdo con el informe al que tuvo acceso EL UNIVERSAL, se infiere que uno de los principales responsables de la violencia en Parácuaro es una persona apodada El Many Carrillo, quien el 30 de mayo resultó lesionado en un enfrentamiento. Tras esa balacera que dejó viviendas, automóviles y negocios dañados por el choque a tiros, El Many, quien escapó lesionado, mantiene incomunicadas las poblaciones de Chonengo y Arapóndiro, donde se oculta y mantiene asediada a la gente. El martes 12 de junio, tres personas identificadas como integrantes de Los  Viagras fueron asesinados a tiros por otro grupo al interior de la estructura delincuencial de los hermanos Sierra Santana, hecho que se sumó a la disputa interna.

Confirman ruptura. En entrevista, el secretario de Seguridad Pública de Michoacán, Juan Bernardo Corona Martínez, confirmó la fractura interna del grupo criminal de Los  Viagras.

“Es un problema entre grupos delincuenciales, se habla de que son del mismo grupo y, efectivamente, estos días se ha acentuado. Sin duda esta disputa ocasiona una situación de inestabilidad; nosotros, como gobierno, como grupos de coordinación estamos trabajando a 100%”.

—¿Este pleito interno anuncia el próximo fin de Los  Viagras?

—No quisiera adelantar cosas, el trabajo que venimos haciendo es con la finalidad de que estas células delictivas cada vez sean   menos en las diferentes regiones del estado, es la obligación que nosotros tenemos, pero eso habla del trabajo que se ha venido haciendo, de las reacciones que tienen ellos, la desesperación que tienen, ese pleito que ya traen entre ellos   y nosotros, como autoridad, tenemos que estar muy al pendiente, pero sobre todo con presencia y trabajar en la detención de puntos generadores de violencia.

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