Chilpancingo.— El edil de Iguala, Antonio Jaimes Herrera, quien el lunes reconoció que los contagios en su municipio están fuera de control, informó ayer que solicitará a las empresas y comercios que siguen operando, que realicen a sus empleados la prueba de Covid-19 para prevenir un nuevo brote.
En conferencia de prensa, a través de las redes sociales, Jaimes Herrera dijo que una de las primeras solicitudes será a la tienda Aurerrá, ubicada frente a la abarrotera El Zorro y a unos metros del mercado municipal, ambos sitios considerados los focos rojos de la pandemia en Iguala.
Explicó que con las pruebas podrán implementar un cerco sanitario para quienes den positivo y ponerlos en cuarentena. Además, las tiendas que tengan problemas serán cerradas y reabiertas hasta que estén libres del virus.
El aceleramiento de contagios en Iguala inició con el brote en la abarrotera. El 16 de abril se confirmaron los tres primeros casos positivos de trabajadores de la abarrotera; sin embargo, continuó abierta y una semana después otros 39 empleados dieron positivo.
El reporte de la Secretaría de Salud federal indica que en Iguala hay 43 personas contagiadas por Covid-19 y 12 defunciones, sin contar los 42 casos del citado establecimiento, porque las pruebas se hicieron en un laboratorio privado.
Sobre los fallecimientos por el virus, el alcalde dijo que tiene confirmados tres casos, además de los que contabiliza la dependencia federal, para un total de 15.
Sin embargo, reconoció que podrían ser más, ya que entre el viernes y el lunes murieron otras ocho personas con los síntomas de coronavirus, pero aún no han recibido los resultados de la prueba.
Jaimes Herrera agregó que a partir del jueves un equipo de la Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro) comenzará a realizar 50 pruebas al día para ir identificando nuevos contagios.