Ciudad Juárez.— Tras el asesinato de la doctora Masiel M., que laboraba en el –Bienestar de la comunidad de San Juanito, municipio de Bocoyna, pasantes de Medicina de Chihuahua alzaron la voz para exigir seguridad y dicen que rechazarán ser enviados a poblaciones de la Sierra Tarahumara hasta que no se garantice la seguridad en la zona.

“Realmente, nosotros no nos negamos a la realización de nuestro servicio social, es parte de nuestra formación, de nuestras obligaciones; sin embargo, no estudiamos para que nos trunquen los sueños y nos asesinen”, expuso Alejandra, joven egresada de la carrera de Medicina en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ).

Ella, como muchos otros médicos pasantes, solicitarán este 14 de julio su plaza para realizar su servicio social ante el sector Salud. La localidad donde harán su trabajo durante un año se les da a conocer al día siguiente y tienen 15 días para presentarse en su nueva unidad. Por lo general, muchos estudiantes son asignados a instituciones médicas de comunidades rurales.

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“No solo soy yo, somos todos los compañeros, y no sólo es por una situación que se vio apenas hoy, la universidad ya tiene el antecedente [de otros ataques a doctores]. Iríamos a la sierra únicamente si se nos garantiza la seguridad”, añade.

El no realizar su servicio social representa para los pasantes no obtener su título como médicos cirujanos, lo que les impide ejercer su profesión.

La estudiante consideró que la autoridad en Chihuahua ve o trata la violencia contra los médicos en la sierra como casos ais- lados, por lo cual únicamente se cambia de plaza a los pasantes o concluyen antes su periodo de servicio social, que debe ser un año, porque no se les garantiza la seguridad.

“No sabemos ni siquiera qué plazas se abren con anticipación. La selección es por promedio; sin embargo, no tenemos conocimiento y es una situación que los pasantes se tienen que ir a vivir a estas comunidades. En realidad lo único que pedimos es plazas seguras”, dijo.

En cuanto a los recursos que reciben para poder estar en la zona serrana prestando su servicio se contó que se ofrece una beca dependiendo del lugar al que van; sin embargo, ésta no es suficiente para solventar los gastos básicos, como renta de vivienda, alimentos y gasolina.

Los pasantes de Medicina exhortaron, por medio de un escrito, a que se haga de conocimiento público y con anticipación la oferta de plazas establecida para cada generación, y no esperar hasta el día de la asignación, cuando no puede pedir cambios.

También pidieron que sean eliminadas las plazas con alto índice delictivo e incluso aquellas con antecedente delictivo que comprometan la vida e integridad de quienes son enviados.

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Prometen seguridad

Al respecto, el director del Instituto de Ciencias Biomédicas, Salvador Nava, informó que insistirá ante el sector Salud estatal para que las plazas que se asignen sean en lugares en los que las autoridades garanticen la seguridad de los egresados.

Aclaró que la asignación de los destinos es facultad del sector Salud, pero la universidad tiene una gestión permanente de seguimiento.

Por su parte, la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, aseguró que hay seguridad en la zona serrana. Precisó que elementos de Seguridad Pública estatal y el Ejército continúan en la sierra, como parte de un operativo en la región.

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