En los estados, el Día del Maestro transcurrió entre protestas, paros y la aprobación de la reforma educativa en Michoacán, Quintana Roo, Jalisco y Puebla. Mientras en estas entidades legisladores aplaudían los cambios a la ley, en calles de Chiapas, Oaxaca y Guerrero profesores reclamaban la abrogación de “un maquillaje a la ley educativa, impulsada inicialmente por el gobierno de Enrique Peña Nieto”.
En Oaxaca, profesores de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) iniciaron un paro laboral de 72 horas para movilizarse durante estos tres días en el estado y en la Ciudad de México, en exigencia de la abrogación de la nueva reforma educativa.
Ayer por la mañana, los sindicalizados —encabezados por su secretario general, Eloy López Hernández— comenzaron una marcha del crucero de Trinidad Viguera hacia el zócalo de la ciudad oaxaqueña. Mientras, otro contingente se movilizó en la capital del país como parte de la convocatoria de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Durante el trayecto, el sindicato reiteró su rechazo a la nueva reforma educativa y exigió al Presidente de la República su cancelación al considerar que perjudica sus derechos.
“A nosotros no nos convence, porque no resuelve la necesidad del magisterio, nosotros lo hemos dicho y le decimos a Esteban Moctezuma [secretario de Educación Pública]: no tenemos nada qué celebrar, seguimos en pie de lucha”, señaló el dirigente Eloy López Hernández.
Más manifestaciones. En tanto, en Chiapas, docentes adheridos a la CNTE también iniciaron un paro de labores de 72 horas en protesta contra la actual reforma educativa.
Los maestros, agremiados en la Sección 7 del SNTE, estuvieron acompañados de estudiantes, normalistas y organizaciones sociales y campesinas. Marcharon del parque Chiapasionate, en el sector oriente, al zócalo de la capital de Chiapas, donde montaron sus campamentos y permanecerán en plantón durante tres días.
La CNTE en Chiapas anticipó que el paro indefinido es el último recurso legal de la clase trabajadora para ser escuchada y exigir el cumplimiento de sus “justas demandas”.
“El paro indefinido no es un capricho de los dirigentes sindicales, es una decisión consciente de las bases frente a la embestida neoliberal contra los derechos del pueblo”, dijeron.
Por su parte, el Congreso de Guerrero anunció al suspensión de actividades hasta el próximo lunes 20 de mayo por el anuncio de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) de una jornada de movilizaciones contra la aprobación de la reforma educativa.
La tarde del martes, el Congreso local aprobó las modificaciones a la ley con la mayoría de votos de Morena. Sólo tres legisladores votaron en contra, entre ellos el presidente de la Comisión de Educación, el morenista Ricardo Castillo. En la sesión del martes, la presidenta de la Mesa Directiva, Verónica Muñoz Parra, citó a los diputados hasta el próximo 20 de mayo, tras el anuncio que hizo la CETEG de movilizarse este jueves y viernes en el estado.
Apenas el pasado 2 de mayo, profesores de la CETEG vandalizaron las instalaciones del Legislativo, destruyeron aparatos de oficinas, rompieron vidrios y quemaron papelería.
Piden ocultar sueldos. En Morelos, la Sección 19 del SNTE desayunó con el gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo para celebrar el Día del Maestro. Los profesores con 15 y hasta 50 años de servicio recibieron reconocimientos y estímulos económicos.
Sin embargo, no todo fue festejo, ya que otro grupo de maestros —adheridos al Movimiento Magisterial de Bases, vinculado a la CNTE— marchó por las calles de Cuernavaca para afirmar que no permitirán el regreso de Elba Esther Gordillo a la dirigencia nacional del magisterio.
En el evento con el gobernador, el director del Instituto de Educación Básica en el estado, Eliacín Salgado de la Paz, pidió al mandatario no publicar los sueldos de los maestros por las condiciones que atraviesa el país.