Revolucionarias y transgresoras. En el actual proceso electoral las mujeres dejaron de militar en los partidos y comenzaron a hacerlo en el feminismo, así lo narra Nancy Castañeda, vocera de Las Paritaristas, una agrupación de mujeres políticas y de la sociedad civil en Jalisco, que este año le dio la vuelta a las elecciones.
Preocupadas por anteponer los derechos de las mujeres y llevar a los puestos de toma de decisiones la agenda feminista, Las Paritaristas buscan que, antes de un partido, quienes lleguen a los cargos de poder sean mujeres que luchen por los derechos.
“Han hecho cosas que nadie hace, por ejemplo, las candidatas de partidos locales, que no competirán en la elección federal, están promoviendo a compañeras de otros partidos que ya asumieron la agenda feminista. Este 2021 las candidatas se están apoyando entre ellas, se postean una a la otra en redes sociales y se envían mensajes de tipo ‘quiero verte en la curul’”, platica Nancy.
El origen de Las Paritaristas se describe en una consigna del feminismo: “No estábamos solas, estábamos dispersas”, así se siente cuando cuentan su historia, que tiene origen en la Red de Mujeres Jóvenes por la Democracia Paritaria, una agrupación multipartidista, pero de mujeres que aún no llegaban a ningún cargo, a la que pertenece Nancy.
“En Jalisco, históricamente, sólo dos grupos habían defendido la agenda de los derechos humanos, la Red de Mujeres Jóvenes y G10 por Jalisco, de empresarias. En 2018 logramos a través del activismo que se obligara la paridad, pero sólo pasamos de 5 a 25 alcaldesas (...) Este 2021 en la Paridad en todo, el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Jalisco (IEPC) quiso aplicar las mismas reglas de 2018 y entonces metimos una impugnación, pero de manera histórica aparecieron 35 más”, narra.
Entonces, explica, todas las mujeres que habían impugnado fueron convocadas y, tras charlas, conformaron Las Paritaristas, firmando un pacto de sororidad para apoyarse y teniendo como primer logro que en los 10 municipios más importantes del estado fuera obligatoria la paridad.
“Para lograr esto tuvimos que irnos hasta la última instancia, acordamos que instancia que se dijera a favor de los derechos humanos, pero en el acto nos fallara, lo íbamos a clausurar simbólicamente (...) Abrimos el pacto de la sororidad para todas las candidatas del estado, fueran o no parte de Las Paritaristas y en el cual se comprometían a no atacarse entre ellas, porque ya sabemos que hay un pacto patriarcal detrás de cada una de nosotras”, explica.
Hoy, Las Paritaristas suman a candidatas de las 13 fuerzas electorales de Jalisco, 124 aspirantes firmaron el pacto de sororidad y más se sumaron desde los municipios. Además, han logrado que algunas firmen un acuerdo en que se comprometen a, en el caso de ganar, trabajar temas en favor de las mujeres, a los que la política tradicional a huído, como la despenalización del aborto. Otro punto en el que se han respaldado es en brindarse la seguridad que el Estado les ha negado.
“Tras la violación de una de las aspirantes, a la que respaldamos, decidimos crear una red de candidatas, para monitorearnos entre todas, para que, si ocurría un caso de violencia, no tuvieran que llevar solas el procedimiento. También nos vigilamos a través de un chat”, dice.
A días de las elecciones, Las Paritaristas han acusado ser víctimas de acoso y amenazas, por la defensa de otras mujeres en la política, un espacio al que ya llegaron y que no les podrán volver a arrebatar.