Cancún, Q. Roo.- La probable construcción del mega proyecto Tren Maya, en el tramo 5, que va de Cancún a Tulum, modificará radicalmente la imagen y el paisaje que hoy se tiene de ese corredor turístico, en el que serán demolidos tres importantes puentes vehiculares sobre la carretera federal, a la altura de Puerto Morelos, frente al acceso hacia el hotel Moon Palace y en Puerto Aventuras.
El ferrocarril híbrido -que funcionará mediante diésel y electricidad- correrá por el centro de la carretera federal de cuatro carriles, pero será elevado en buena parte del trazo o en casos como Playa del Carmen, se adentrará a la ciudad mediante un viaducto elevado, lo que abrirá la vista al mar, para luego reincorporarse a la vialidad federal.
Los árboles ubicados en el actual camellón central serán extraídos y habrá ejemplares que sean trasplantados; se construirán 40 puentes y viaductos, 24 de ellos en entronques y retornos e instalarán pasos peatonales y de fauna, informó el responsable del Tramo 5 por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Raúl Bermudez, quien no dudó en calificar al Tren Maya como “un proyecto muy capitalista, es un proyecto capitalista de a’deveras, no de cuates”.
El funcionario anunció que, en Tulum, se pretende rescatar la idea de construir un Aeropuerto Internacional -que impulsó el entonces presidente Felipe Calderón, sin concretarse- y, en Punta Venado, un puerto y una marina, mientras que en el Aeropuerto Internacional de Cancún ya se ubicaron los terrenos en donde se construirán la estación turística y la de carga.
Esta última forma parte de “Cancún Logística”, un complejo de 480 hectáreas pensado para la distribución de combustible a nivel peninsular, que contará con una central de abastos que provea de insumos alimenticios a la zona hotelera.
Bemudez, junto con el equipo de asesores ambientales, culturales, sociales y jurídicos del Tramo, participó en un foro virtual convocado por la Asociación Mexicana de Propietarios Inmobiliarios (AMPI) Cancún, para conocer a detalle los avances del proyecto en esta región.
Durante su exposición, resaltaron que el Tramo 5 -de Cancún a Tulum- es el único de los siete que recorren Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán, que se desarrollará bajo una modalidad de Asociación Público Privada (APP), llamada “propuesta no solicitada”.
Su representante jurídico explicó que esto ocurre cuando un particular detecta una necesidad existente en materia de infraestructura, elabora un proyecto y los estudios -a costo propio- y lo presenta al gobierno.
El consorcio en cuestión es BlackRock Inc., la administradora de fondos más grande del mundo, con presencia en México desde el 2008, con activos en fondos de pensión, mercado bursátil y la industria energética.
La compañía internacional presentó la propuesta a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), que a su vez le dio vista al Fonatur para su revisión, análisis y aval, como titular del megaproyecto Tren Maya.
Además, realizó un análisis de permisos, autorizaciones y licencias para sacar adelante el proyecto.
“Una vez que se dio el visto bueno se presentó ante la Secretaría de Hacienda y se concursó. Hoy en día ya está licitado, concursado en Compranet desde el 23 de junio y se va a tener un fallo de quien va a elaborar la obra, el 24 de agosto de este año”, explicó el jurídico, quien dijo que BlackRock Inc. puede participar en el concurso y tener preferencia.
“En el momento en que Fonatur y el gobierno federal aceptan el proyecto le expiden un certificado a BlackRock, que será pagadero en caso de que no concurse la licitación o alguien más la gane, lo que hace más transparente el proceso, ya que cualquiera puede ganar. Como BlackRock hizo los estudios y el proyecto y lo presentó, tiene ventaja”, subrayó.
De acuerdo con el representante jurídico del Tramo 5, el consorcio internacional, de ganar la licitación, prácticamente puede iniciar en cualquier momento la obras desde que se firme el contrato porque, según, ya cuenta con autorizaciones “muy avanzadas”.
Los detalles
De Cancún hacia Playa del Carmen se contempla la ampliación de carriles. El puente vehicular elevado en la cabecera de Puerto Morelos y el también llamado “Puente Chapur” -con referencia al presidente del Grupo Palace, José Chapur- serán demolidos.
Pegadas al Aeropuerto Internacional de Cancún, habrá dos estaciones. Una de pasajeros, para que bajando del avión se conecte con el Tren y que se conectará con la ciudad a través de un proyecto de Tren Ligero propuesto por la Agencia de Proyectos Estratégicos de Quintana Roo (Agepro), que servirá como alimentador de pasajeros del Tren Maya.
Durante su turno, Bemudez detalló que la otra estación estará en terrenos atrás del aeropuerto. Se cuenta ya con un fideicomiso para operar el polo de desarrollo de carga, denominado “Cancún logística, en 480 hectáreas. Contará con una central de combustibles para abastecer al aeropuerto y una central de abastos de la Península de Yucatán, lo que diversificará el concepto de “sol y playa”.
Actualmente Deloitte elabora los estudios de mercado y el proyecto promete ser un “abanico de oportunidades de inversión”, dijo.
Playa del Carmen tendrá una estación elevada que servirá como mirador. El Tren Maya cruzará la ciudad por un trazo paralelo al mar, a desnivel y conservará su puente elevado vehicular, pero los bajos serán rescatados para albergar ahí terrazas, cafeterías, foros de arte, centros culturales y pequeños restaurantes, “hasta hoteles”, se mencionó.
Sobre los árboles existentes en los camellones centrales, de Cancún a Tulum, se informó que se elabora un inventario con la Asociación Mexicana de Arboricultura (AMA), para evaluar cuáles podrán ser trasplantados “a donde se necesite”.
Ante los recurrentes cuestionamientos sobre la probable vulnerabilidad del tramo, que ha registrado el desplome de cuevas subterráneas como la bautizada por espeleobuzos como “Me lleva el Tren” y otros, Bermudez consideró que en lugar de pensar en que el suelo cárstico no resistirá el peso del Tren y toda la infraestructura proyectada, “se invertirá lo necesario para corregir errores del pasado”.
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