Más Información
Diputados avalan súper secretaría de García Harfuch; SSPC investigará delitos y coordinará inteligencia a nivel nacional
“Aún hay tiempo”: Inai lamenta extinción aprobada por Diputados; pide al Senado reconsiderar reforma
Yasmín Esquivel defiende la reforma judicial en Con los de Casa; alejado de la realidad pensar que es una venganza política, afirma
"Soy del mero Sinaloa, donde se rompen las olas"; al ritmo de banda y aguachile, apoyan a músicos y meseros afectados por violencia
Con prórroga o sin ella, elección judicial va, asegura Taddei; afirma que presupuesto de 13 mmdp no es ninguna “ocurrencia”
Pachuca.— En esta ciudad lo que más se escucha es: “¡Qué calor!”. Las temperaturas en Pachuca han alcanzado hastas 33 grados centígrados, 12 grados más que la temperatura promedio, un clima que es extremo para una población que no está preparada ni en la ropa ni en la infraestructura.
En las calles se ve poca gente, la mayoría prefiere guarecerse en sus casas o en sus oficinas, y quienes por alguna razón tienen que salir, hacen lo que pueden para protegerse, las sombrillas y los sombreros han salido, por fin, del clóset.
Pachuca es una ciudad que tiende a ser fría y con viento que refresca el ambiente, por lo que el clima es “inaguantable”, dicen sus habitantes.
Desde la semana pasada la ola de calor ha ocasionado que en los picos se registren hasta 33 grados. A las 10:00 horas del lunes el termómetro ya marcaba 24 grados, y a las 14:00 horas alcanzaba 31. En otras regiones, como en la Huasteca Hidalguense, la temperatura llega a 42 grados.
“Que pase pronto”
En un puesto de comida rápida Jenni Cruz atiende a sus clientes, que son pocos; dice que en estos días sus ventas han bajado hasta 30%.
“Casi no viene la gente, no salen con el calor y creo que hasta comen menos. Lo que sí es que el agua y el refresco se acaba rápido”, explica.
Narra que al mediodía es la hora de menor venta. El sol está en su punto y el calor no deja a la gente acercarse a la esquina, mucho menos quieren ir al puesto por el calor de la parrilla.
Amado se considera del team frío; dice que “en Pachuca no estamos hechos para este clima”.
“Es horrible. A diferencia de las ciudades calurosas, aquí no hay climas en las oficinas o centros de trabajo. En las noches el calor agobia y no deja dormir, aunque dejes la ventana abierta no circula aire y con ventilador el ruido no te deja conciliar el sueño o te reseca las vías respiratorias”, se queja.
Arlan Cruz coincide con Amado, en Pachuca no hay una cultura para soportar el calor, aquí la gente no está acostumbrada al bloqueador solar.
En un día de clima extremo en Pachuca el termómetro marca 26 o 27 grados. En estos días ya llegó a 33 y quienes más lo sufren son los que están a la intemperie como Héctor Urióstegui y Juan, trabajadores de la construcción.
“Lo que podemos hacer sólo es hidratarnos con agua y usar las gorras, no nos queda de otra, hay que trabajar pero es demasiado calor, sólo esperamos que esto pase pronto”, dicen.