Aguascalientes, Ags.- Al comenzar la semana de la familia, el obispo Juan Espinoza Jiménez repudió la práctica del aborto y a la mujer que mata a su hijo indefenso. "¡Es terrible!".
“Es repugnante y da tristeza ver que un hermano mata a un hombre a balazos, es más repugnante ver a una madre que mata a su hijo en el vientre”, dijo en la celebración religiosa de este domingo.
De acuerdo con información preliminar, al menos 100 abortos se habían practicado en las clínicas después de la despenalización y después se dijo que son mil y que van a seguir adelante, expresó.
En Catedral conminó a los asistentes a pedir a Dios que “este genocidio se detenga”, así como por las madres que se dejan llevar por estas ideologías, por aquellos que promueven el aborto y por todos estos niños que mueren inocentes, sin ver la luz de la vida.
“Me preocupa una cosa y hay que pedirle a Dios, hay muchos niños; al menos a los que matan, los ven, son gente grande, son gente que se puede defender, pero lo más triste es que muchas mamás den muerte a sus hijos en su vientre”.
Comentó que hay situaciones o accidentes por los que las mujeres sin querer abortan, por accidente no porque lo hayan querido; lo grave es cuando se quiere, se hace a un lado la ley de Dios y se realiza.
El prelado diocesano reiteró que es repugnante matar a un hombre a tiros de pistola o de otra manera, pero es más repugnante que una madre que debería de proteger a su hijo lo destruya.
Por ello, el obispo hizo un llamado a los fieles católicos para que se unan a su parroquia a reflexionar sobre la familia, y a participar el domingo en el seminario, en el encuentro con las familias y misa que oficiará en ese lugar.
Espinoza Jiménez lamentó que la violencia esté desatada en México y la registrada la semana pasada en territorios de la Diócesis de Aguascalientes en donde ha muerto mucha gente. Entre los sitios con asesinatos mencionó Encarnación de Díaz.
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