El 91 por ciento de los comercios de Nuevo León reportó durante marzo una disminución promedio de 57 por ciento en sus ventas , y el 62 por ciento de los establecimientos aseguraron que no estarían en condiciones de cumplir sus compromisos fiscales este mes de abril.

Según encuesta realizada del nueve al trece de abril, la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Monterrey (Canaco), el 91 por ciento de las empresas tuvieron el mes pasado una disminución promedio de 57 por ciento en sus ventas en comparación con el cierre del mes de febrero.

La encuesta que fue aplicada entre pequeñas, medianas y grandes empresas de los sectores comercio, servicios y turismo de la entidad, arrojó asimismo que el 75 por ciento de los establecimientos se encuentran cerrados temporalmente o han disminuido sus horarios de apertura .

Según la Canaco, otro dato relevante es que el 43 por ciento de las empresas reportó una disminución de 16 por ciento en su personal ocupado, con respecto al mes de febrero.

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En la encuesta se preguntó qué tipo de apoyos del gobierno federal, les ayudarían a sortear la situación, y mencionaron diferir el pago de impuestos federales; diferir las cuotas del IMSS e INFONAVIT ; y opinaron “que el gobierno debe implementar un sueldo de emergencia para cubrir una parte del salario de los trabajadores, y como cuarto punto se mencionó la aplicación de la compensación universal del ISR y del IVA”.

El 67 por ciento de las empresas encuestadas consideran que dentro de seis meses (octubre), estarán en una situación peor a la actual, mientras que un cuatro por ciento, consideran que estarían cerradas para esa fecha.

Finalmente, y ante los resultados de la encuesta, la Canaco que preside Gabriel Chapa Muñoz , consideró “irresponsable por parte del gobierno federal seguir retrasando decisiones relevantes para las empresas, los ciudadanos y la economía en general”.

Por lo anterior, demandó apoyos inmediatos en materia fiscal y de financiamiento para ayudar a las empresas, en especial a las micro, pequeñas y medianas, a fin de buscar salvar la mayor cantidad de empleos posibles.

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Advirtió Canaco que de no cristalizarse apoyos tangibles para las MiPymes y sus trabajadores, “se corre el riesgo de una afectación severa a la planta productiva que se tardaría años en corregir, incrementando la pobreza en el país, ya que se perderían miles de empresas y empleos, que no se subsanarían con programas sociales que una recaudación decaída pudiera permitir”.

Finalmente señaló la cámara de comercio que la situación de las empresas es por demás agobiante, pues mientras hacen grandes esfuerzos por mantenerse a flote con sus trabajadores, y buscan desesperadamente algún tipo de apoyo de su gobierno, como lo hacen muchos países del mundo, “sólo reciben disposiciones fuera de una lógica económica y un trato fiscal intimidante y persecutorio”.

asgs

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