Más Información
Bertha Alcalde Luján es avalada por el Congreso de la CDMX como nueva fiscal; tomará posesión el 10 de enero de 2025
Osiel Cárdenas Guillén, fundador de los Zetas, enfrenta cargos por delincuencia organizada; le dictan auto de formal prisión
"Te encontré, hija", Madre de Francisca Mariner localiza el cuerpo de la joven en el Semefo; estuvo 4 años en el lugar sin identificar
Citlalli Hernández exige justicia para María Elena Ríos; solicita a autoridades mantener Vera Carrizal bajo custodia
Líderes empresariales de México y Canadá alistan reunión con Sheinbaum en enero; previo a investidura de Trump
El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) reportó que una nube de polvo proveniente del Sahara se ubica sobre el Océano Atlántico, el Mar Caribe, y en pocas cantidades en el Golfo de México, en las cercanías de la Península de Yucatán.
El organismo, dependiente de la Coordinación Nacional de Protección Civil, detalló que dicha nube puede identificarse en la imagen del satélite GOES 16, publicada por la Comisión Nacional del Agua, y aclaró que las tormentas de arena y polvo son fenómenos meteorológicos comunes en las regiones áridas y semiáridas.
Detalló que las principales fuentes de estos polvos minerales son las regiones áridas de África septentrional, la península arábiga, Asia central y China, y precisó que la cantidad de polvo que ingresa a México depende de la intensidad del viento y de la concentración del material sobre África.
El Centro planteó que el polvo ingresa por lo general por la vertiente oriental y sureste del país, con un efecto directo en la nubosidad y las lluvias, pero la Sierra Madre Oriental es una barrera natural contra su ingreso al centro del territorio mexicano, al que sólo logran llegar pequeñas concentraciones.
El polvo proveniente del desierto africano se caracteriza por tornarse grisáceo durante el día, con atardeceres rojizos y poca nubosidad.
Ante la eventual concentración de polvo, el Cenapred recomendó a la población evitar exponerse, resguardarse, cerrar las entradas de aire a los cuartos durante las tormentas, y de ser indispensable mantenerse a la intemperie, llamó a usar lentes, cubrebocas o pañuelo, sobre todo quienes padecen males respiratorios.