Chilpancingo.— Durante sus primeras horas como alcaldesa de Acapulco, la morenista Abelina López Rodríguez propuso solicitar un préstamo de 200 millones de pesos para comprar 35 camiones recolectores de basura.
El préstamo fue aprobado por la mayoría de los regidores, para comprar los camiones a la empresa Remolques y Plataformas de Toluca, S.A. de C.V.
Sin embargo, la propuesta provocó la protesta de un grupo de regidores, quienes señalaron que por el monto de la compra se tuvo que hacer una licitación.
Horas antes, en su toma de protesta como alcaldesa, López Rodríguez denunció que recibió la administración “devastada” y “paralizada” por las deudas que dejó el gobierno de su compañera de partido Adela Román Ocampo.
Denunció que Román Ocampo le dejó una deuda de 280 millones de pesos, además de otros 780 millones de pesos ante la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y sin dinero para pagar salarios y aguinaldos a los trabajadores.
Un día antes de su toma de protesta, acusó a Román Ocampo de haberle entregado “pura paja” en la entrega-recepción.
En la primera sesión de Cabildo, López Rodríguez justificó el préstamo para la compra de los camiones en el cumplimiento de uno de sus compromisos.
La nueva edil recibió el ayuntamiento con los servicios básicos colapsados: sin la recolección de la basura y sin agua potable.
Hace unos días, la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Guerrero (Copriseg), dependiente de la Secretaría de Salud estatal, declaró una emergencia sanitaria por el acumulamiento de basura en las calles del puerto, tras suspenderse la recolección.
Al respecto, la exalcaldesa justificó que el ayuntamiento no contaba con el dinero suficiente para pagarle a la empresa encargada, así que lo hacía con recursos propios.