Zacatecas.- Desde que tenía 15 años, Jaime Vladimir Espinosa Herrera se interesó por los problemas del medio ambiente y del campo. Hoy, a sus 20 años, el joven es ingeniero ambiental por el Instituto Politécnico Nacional y trabaja en un proyecto propio de biofertilizantes.
Originario del municipio de Fresnillo, quien apenas el año pasado ganó el Premio Estatal de la Juventud Mérito Campesino 2017, menciona que la democracia es la mejor herramienta para expresarse, pero lamentablemente “ningún partido representa los ideales de sus militantes”. Desde su trinchera, asegura que los políticos son un reflejo de los ciudadanos.
Mientras estudiaba, decidió ser emprendedor. En 2015, junto con otros amigos desarrolló un proyecto de fertilizantes orgánicos a base de nopal, gracias al cual crearon una pequeña empresa para vender el producto, al tiempo que concientizaban a los agricultores de que el secreto de un suelo sano y fértil se caracteriza por los niveles de materia orgánica que tenga.
A partir de ahí, dice, tocó puertas en todas las dependencias del sector agrícola y ambiental, donde le fue posible. Su proyecto fue bien recibido, lo que le ha permitido promover la agricultura sustentable.