El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), lamentó la muerte de la pequeña Candelaria, fallecida en Ramos Arizpe, pero aclaró que la atención que se brindó en el Hospital General de Zona (HGZ) No. 1 fue adecuada, "conforme a los protocolos y la guía de práctica clínica".
El caso de la menor de 11 atrajo la atención porque en primera instancia se pensó que la muerte había sido producto de una auto medicación por parte de los padres. Sin embargo, enseguida la Fiscalía de Coahuila precisó que la necropsia había arrojado que la causa del fallecimiento había sido por neumonía. Al mismo tiempo, el fiscal Gerardo Márquez refirió que la investigación seguía abierta por probable negligencia médica.
A través de un comunicado, la Dirección del nosocomio explicó que ante el crítico estado de salud en el que llegó la niña de 11 años, se tomó la determinación de informar al Ministerio Público.
El IMSS aseguró que en ningún momento personal médico del hospital emitió algún dictamen o diagnóstico de intoxicación medicamentosa, simplemente y conforme a la Ley, se dio parte a la autoridad para que investiguen los motivos del deceso.
Asimismo, remarcó que no hay antecedentes de que la menor haya acudido a consulta en ninguna unidad de la región sureste de Coahuila, y que la única atención que se brindó fue el mismo día que falleció.
La Fiscalía informó que los padres de la menor habían llevado a la hija al Seguro una ocasión antes al día en que la niña perdió la vida.
sjno