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Xalapa.— El gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, rechazó que el accidente ferroviario ocurrido ayer fuera por sabotaje, y arremetió en contra de la empresa Ferrosur por haberlo dado a conocer.
El pasado sábado, un total de 17 vagones descarrilados y más de siete personas heridas (entre ellas cinco migrantes) dejó un accidente de trenes presuntamente provocado por un sabotaje, según acusó la empresa de ferrocarril.
Los informes policiales revelaron que los hechos ocurrieron a las 4:30 horas de la madrugada cuando grupos delincuenciales presuntamente sabotearon los frenos de una locomotora para tratar de robar su carga, lo que provocó el choque de dos trenes en el municipio de Orizaba.
La empresa emitió un comunicado de prensa en el que indicaba que se trató de un sabotaje, el sexto en el año contra trenes que transitan en Veracruz.
“No hay evidencia de que haya sido un sabotaje, fue una declaración sin fundamento e irresponsable”, reviró ayer el mandatario.
Yunes Linares acusó a Ferrosur de que a más de 24 horas del percance en las instalaciones de la empresa no haya presentado ninguna denuncia.
Tras concluir su reunión del Grupo de Coordinación Veracruz, el mandatario estatal informó que ya se están investigando las causas de la colisión de los dos trenes; sin embargo, advirtió que de no haber sido un sabotaje, como lo manifestó la compañía en su momento, pedirán que se ofrezca una disculpa pública en torno al caso.
Yunes Linares insistió en que en Veracruz lo único que ha ocurrido son descarrilamientos accidentales, pero no asaltos a ferrocarril.
“Los asaltos a trenes se han registrado en tramos de Puebla; en Veracruz sólo se han dado accidentes por descarrilamientos, pero no asaltos”, aclaró.
Apenas el pasado 16 de mayo un tren de carga fue descarrilado en la zona montañosa central de Veracruz, presuntamente para poder hurtar su mercancía antes de llegar al llamado túnel 15 Guerrero, a la altura del municipio de Acultzingo.
Personal de seguridad privada a cargo del resguardo del cargamento y maquinaria se trasladó al lugar, donde encontraron dos góndolas fuera del riel, las cuales presuntamente pretendían ser saqueadas por delincuentes.
Las corridas quedaron suspendidas por espacio de cinco horas, lapso que demoraron las maniobras para recuperar los vagones y el cargamento, así como supervisar las condiciones de las vías.
El 8 de mayo, un grupo delincuencial descarriló en esa misma zona montañosa central del estado un tren para hurtar la mercancía que transportaba.
