Culiacán.— La espera terminó sin que la pandemia del coronavirus ceda, pero la reactivación de negocios no esenciales, entre ellos de bisutería, cosméticos, ropa, calzado, restaurantes, joyerías, tiendas departamentales y talleres no fluye al ritmo deseado, ya que los clientes son mínimos.

En la capital del estado, la movilidad, desde que inició el primer contagio el 28 de febrero pasado, se mantuvo en casi 45%. Además, 70 mil unidades productivas, de las 122 mil 500 registradas en todo el estado, se mantuvieron abiertas por estar vinculadas a la actividad prioritaria de la producción de alimentos en el campo.

Después de casi cuatro meses de la crisis, el viernes pasado, los grandes centros comerciales reabrieron con nuevas normatividades y horarios recortados, al igual que los restaurantes y pastelerías que se ubican dentro de sus áreas.

En estas plazas comerciales, en el área de comidas rápidas sólo 5% de los negocios volvieron a dar servicio, ante el escaso movimiento que aún ser observa de comensales tradicionales, por lo que se estima que en una semana más reanuden los servicios de ventas.

Teresa “N”, mesera en uno de los restaurantes de la mayor plaza comercial ubicada en el desarrollo urbano de Tres Ríos, platica que está endeudada y ve con desaliento cómo sus ingresos cayeron por las escasas propinas que recibe.

Antes de la pandemia, en un domingo familiar obtenía hasta 700 pesos sólo de propinas; ahora, en los tres primeros días de la reapertura del restaurante, sólo ha juntado 100 pesos, pues el número de comensales es mínimo.

El líder de la industria de gastronomía de Culiacán, Miguel Taniyama Ceballos, atribuye la ausencia marcada de clientes a los restaurantes a las informaciones encontradas que emiten las autoridades sobre el Covid-19.

Por un lado, comenta, se recomienda a la población mantener el aislamiento en los hogares, mientras que por otro lado se habla de la reactivación de la economía, lo que, dice, confunde y siembra temor entre los ciudadanos que no se atreven a ir a los restaurantes.

Diego Castro Blanco, presidente de la Cámara de Comercio en Culiacán, admite que el retorno a las actividades laborales no ha sido fácil, pues se tienen que cumplir nuevos protocolos, no sólo para el personal de los negocios, sino en la atención a los clientes.

Está convencido que la reactivación económica va a tardar, ya que muchas personas sólo compran lo esencial y evitan salir a las calles por recomendación de las autoridades de salud.

El titular de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios, Jorge Alán Urbina Vidales, dio a conocer que se gestiona con las instituciones bancarias que reabran algunas sucursales y aumenten el personal de atención.

Destacó que se volvió un grave riesgo para la salud de sus clientes que etengan que formarse en el exterior de la institución, con temperaturas de hasta 38 grados.

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