En plena pandemia del Coronavirus , en el Museo del Desierto (MUDE), “Esperanza” tuvo octillizos , cuatro hembras y cuatro machos. Ella es una Loba Gris Mexicano , cuya especie --Canis lupus baileyi-- está en peligro de extinción y es una de las que corre más riesgo de desaparecer.
La madre de los cachorros llegó de Cananea, Sonora, en 2015 y el papá que se llama “Reemplazo”, es originario de la Ciudad de México de donde lo trajeron apenas en 2019.
Las crías, cuyo nacimiento es todo un acontecimiento, están bien, son la quinta camada que se reproduce en el MUDE y una de las más grandes que se ha registrado en México.
Fernando Toledo González, director de Fauna del MUDE, dijo a EL UNIVERSAL que el parto óctuple, (dado a conocer hasta ahora que pasó la etapa de peligro), ocurrió entre el 18 y el 24 de abril pasados.
La reproducción en cautiverio de este lobo es fundamental porque en México solo existen poco más de 30 ejemplares en vida silvestre provenientes del programa de recuperación.
Mientras que la población que reportan en Estados Unidos apenas supera los 100 ejemplares en vida silvestre.
El Lobo Gris Mexicano , refirió, es la subespecie de menor talla en Norteamérica y habitaba históricamente desde el sur de Estados Unidos hasta el centro de México.
Debido a la campaña de erradicación de la que fue objeto, a finales de los años 70´s la especie estuvo a punto de desaparecer, apuntó.
Hizo hincapié en que el alumbramiento de los ocho lobeznos es de gran trascendencia nacional e internacional, porque nuestro país lleva casi 40 años luchando por la preservación del Lobo Gris Mexicano.
Por eso, subrayó, México ha unificado esfuerzos con organismos internacionales de conservación de esta especie.
Desde el 2009, agregó, el Museo del Desierto forma parte del Comité Binacional para la Recuperación del Lobo Gris Mexicano, integrado por más de 50 instituciones de México y Estados Unidos.
En los últimos seis años, en el MUDE han nacido 22 cachorros de Lobo Gris Mexicano, de los cuales 18 viven en los albergues.
La reproducción exitosa ha sido posible gracias al apoyo de benefactores como la Fundación WWF - Carlos Slim y la Universidad Autónoma de Coahuila (UA de C) que patrocinaron los albergues del lobo y la clínica veterinaria.
Toledo González destacó que este Museo representa un sitio muy importante en la reproducción de esta especie por el número de nacimientos exitosos que ha reportado.
Para lo cual, resaltó, trabaja estrechamente con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP).
Los esfuerzos tendientes a preservar a este animal iniciaron en 2014 cuando les asignaron la primera pareja para reproducción, que dio a luz a un lobezno en 2015
Al año siguiente, en 2016 nacieron cinco cachorros y en 2017 a cinco más; en 2018 el comité cambió la pareja reproductiva y no hubo descendencia.
Dos años después, en abril de 2019 con una nueva pareja, nacieron tres ejemplares: dos machos y una hembra.
Fue a finales del mes de abril de este 2020 cuando se registró el nacimiento de los 8 lobeznos; 4 machos y 4 hembras de Esperanza y Reemplazo.
“Son 18 ejemplares los que se encuentran en los albergues”, precisó.
Aseguró que todos los cachorros son atendidos, cuidados y alimentados adecuadamente.
Los integramos a los programas de medicina preventiva, nutrición y enriquecimiento establecido para esta especie, remarcó.
maf