Monterrey, NL
.- El sacerdote Alejandro Solalinde , señaló que el muro que promueve el presidente de Estados Unidos , Donald Trump , para frenar la inmigración, será “el monumento más grande que se haya construido a la estupidez , porque no va a servir para nada”.
Afirmó que para lo único que servirá el muro es para calmar de momento la paranoia psicológica de los estadounidenses. Pero sin duda, ocasionará más muertes , porque estos hermanos buscarán rutas más peligrosas para internarse a territorio de Estados Unidos, y caerán en manos de bandas del crimen organizado que los secuestran, extorsionan o los reclutan contra su voluntad.
Solalinde agregó “el pobre de Donald Trump va a meter dos metros de muro, pero los otros (bandas de polleros o traficantes de indocumentados ), harán ocho o más túneles. Expuso que para nadie es un secreto que los cárteles del crimen organizado y la corrupción son los que controlan la frontera.
Entrevistado durante su participación en el foro “Los retos de la movilidad urbana que enfrentamos”, organizado por la agrupación civil “Paso de Esperanza” y la Secretaría de Desarrollo Social de Nuevo León, el sacerdote declaró que mientras no se corrijan las causas de fondo que generan la inseguridad y pobreza que agobian a países como Honduras y El Salvador, además de muchas regiones de México, el flujo migratorio seguirá sin freno hacia Estados Unidos.
El defensor de los derechos humanos, consideró que con José Antonio Meade o Ricardo Anaya , aspirantes de los frentes formados por PRI-PVEM-PANAL y PAN-PRD-MC, en caso de llegar a la Presidencia, seguiría la represión contra los migrantes, y el mismo sometimiento vergonzoso del gobierno mexicano a Estados Unidos, porque ambos aspirantes están muy ligados a las políticas e intereses del país vecino.
En cambio, expresó, con Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, que integran Morena-PT-PES, cambiarían las cosas, delineándose nuevas políticas públicas con un enfoque de respeto a los derechos humanos de los migrantes, que haga a un lado el modelo policiaco que los criminaliza, y se trabaje en conjunto con todas las organizaciones de la sociedad civil que atienden a este sector.
Basó su optimismo en que AMLO ha escuchado el clamor y los reclamos de los que sufren, en sus recorridos por todo el país a lo largo de 18 años, y les daría respuesta.
Madeleine Penman, investigadora de Amnistía Internacional México , expresó que nuestra país tiene leyes que parecen muy progresistas, pero otra es la realidad. “La ley dice que es ilegal detener a un niño en estaciones migratorias, pero en 2016 fueron detenidos más de 40 mil niños migrantes en estaciones migratorias”.
Penman, afirmó que con el endurecimiento de las políticas migratorias de Donald Trump , el contexto no es nada alentador, y la historia nos muestra que los controles duros de la patrulla fronteriza, suelen bajar en los primeros meses el flujo migratorio, pero al no cambiar las condiciones en las regiones o países expulsores, después hay un repunte muy pronunciado.
Mateo Lucas, representante del Centro de Derechos Humanos, Fray Matías de Córdova, de Tapachula Chiapas , dijo que está México está desempeñando el papel que le conviene a Estados Unidos, al blindar la frontera sur, con detenciones y deportaciones masivas.
“Los migrantes son vistos como números y estadísticas, no se investiga por qué vienen huyendo de su país, simplemente se les detiene y deporta”, casi en automático, aunque muchos de ellos serían candidatos a pedir asilo o recibir la calidad de refugiados, señaló Lucas.