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Culiacán.— La mina San Rafael, en Cósala, Sinaloa, que desde enero se encuentra tomada y bloqueada por una disputa sindical, padece pérdidas diarias de 150 mil dólares, por lo que exige que la Fiscalía General del Estado actúe ante las denuncias.
De acuerdo con la minera, durante el tiempo que ha durado el bloqueo, los 327 trabajadores han sido víctimas de amenazas y presiones, como sucedió en el recuento de trabajadores celebrado el pasado 18 de septiembre.
La empresa Americas Gold and Silver, propietaria de la mina, acusó que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje incurrió en violaciones a la libertad sindical al reconocer el recuento y favorecer al Sindicato Nacional Minero de Napoleón Gómez Urrutia y desconocer al sindicato de la CTM (encabezado por Javier Villareal), quien tenía el contrato colectivo desde 2019.
En enero, la compañía canadiense presentó a la fiscalía estatal denuncias penales por despojo y ataques a las vías de comunicación en contra de Yasser Beltrán Kurioca, delegado del Sindicato Nacional Minero y 13 personas más.
Dichas personas presuntamente se introdujeron a la mina de forma violenta, amenazaron al personal de seguridad y desalojaron a los trabajadores de confianza, causando un daño económico estimado de 150 mil dólares diarios de producción.
De acuerdo con una segunda denuncia interpuesta por la empresa canadiense, en la carpeta de investigación 455/2020, del 16 de abril de 2020, se asienta que seis personas encapuchadas con armas largas ingresaron a las instalaciones para robar 40 toneladas de concentrado de plomo con valor de 61 mil 824 dólares.
