Tapachula.— El Instituto Nacional de Migración (INM) suspendió ayer la atención presencial a más de mil migrantes que acudieron para tramitar la Visa por Razones Humanitarias, debido a que no respetaron los protocolos ante el coronavirus, aunque muchos de ellos llevan semanas esperando e incluso han tenido que dormir sobre la banqueta de la dependencia para apartar un lugar.
A las 7:25 horas de ayer, personal del INM, a través de un altavoz, ordenó a más de un millar de migrantes de Cuba, África y Centroamérica que permanecieran en orden y atrás de las vallas para que, en grupos de 10, por nacionalidad, pudieran ingresar a la oficina de regularización migratoria para obtener la mica.
El desorden inició cuando algunos migrantes intentaban ingresar por la fuerza y sin haber hecho fila.
“Guarden el orden, de esta manera no podemos atender a nadie”, insistió el agente migratorio mientras se empujaban para tratar de ingresar por la fuerza, siendo contenidos por efectivos de la Guardia Nacional (GN) con escudos antimotines.
“Ordénense, estamos pasando por nacionalidad, al primer desorden que hagan vamos a suspender la atención”, amenazó el oficial por el altavoz.
Media hora después, ante la aglomeración y el desorden de los extranjeros procedentes de Cuba, África y Centroamérica, la oficina de regularización migratoria del INM decidió cancelar ayer los trámites migratorios y anunció que a partir del próximo lunes se atenderá a través de citas electrónicas que se realizarán en la página oficial de esa institución para evitar contagios.
“El día de hoy se ha suspendido la atención para ustedes, tenemos cupo limitado dentro de las instalaciones; recordemos que estamos en periodo de pandemia y no podemos tener aglomeraciones dentro de las oficinas”, explicó el oficial del INM.
Este anuncio provocó inconformidad entre los migrantes, quienes explicaron que la mayoría de cubanos y centroamericanos tienen casi un mes durmiendo en las banquetas de las inmediaciones de la dependencia, mientras a los migrantes de Haití los atienden en un día especial y hasta altas horas de la noche, reprocharon los caribeños.
“No es justo que migración nos haga esto. Llevamos varias noches durmiendo en las banquetas, apartando nuestro lugar y ahora nos dicen que no nos van a atender”, señalaron molestos los isleños.
Explicaron que desde principios de diciembre pasado se congregan en las inmediaciones de la oficina de regularización migratoria unos 2 mil extranjeros para tramitar la Visa por Razones Humanitarias y sólo atienden a unas 20 personas por día.
Acusaron al personal del INM de cobrar desde mil a mil 500 dólares por tramitar la Visa por Razones Humanitarias sin realizar fila ni esperar tanto tiempo.
“De la fila sólo pasan unos 23 cubanos y dicen que ya está saturada la oficina, pero lo que hacen es que, por atrás, meten a la gente que paga”, aseguran.
Los migrantes advirtieron que se quedarán en plantón indefinido en las inmediaciones de esa sede migratoria hasta que las autoridades les atiendan de acuerdo al orden de la fila.